La maldita evolución

Por Dos Gotas Www.dosgotas.com @blogDosGotas


Dicen que cuando vamos madurando, cuando nos van cayendo años encima, empezamos a ser más tolerantes, más benevolentes, suavizamos carácter y cosas que antes veíamos como cosas absolutamente importantes, con el pasar de los años se convierten en estupideces. Que rara soy … llevo una rachita de aúpa!!!!
Al principio pensé que me estaba dando un brote momentáneo, mejor esperar, ya se me pasaría. Empezó el tema con un cabreo monumental por una foto. La susodicha foto presentaba a dos modelos, las llamo modelos por no llamarlas esqueletos con harapos encima, dos manojos de huesos a los que les habían pintado un rectángulo negro que les iba de lado a lado de la cara, en la zona de ojos, cejas y parte de la nariz, debajo dos círculos de colorete como rodajas de mortadela, en un color terracota-anaranjado y rematando la faena otro rectángulo rojo que iba desde la zona de la nariz hasta casi la barbilla, ocupando toda la zona que rodea los labios, obviamente los labios estaban en el centro del rectángulo.
Viendo la foto empecé a preguntarme cuando empezaron los diseñadores a compincharse con los maquilladores y plasmar de esa forma su odio hacia la mujer. Había visto Burkas, peinados para detener a más de uno … pero ¿tener a esos dos esqueletos pintarrajeados de esa forma?, ¿por qué no nos damos cuenta de que esos que se enriquecen haciendo que intentemos entrar en tallas imposibles nos odian?, y las tendencias de maquillaje ¿que?, he visto cadáveres con mejor aspecto que muchas super-nenas con sus gloss en ristre.
Viendo una foto de la revista Woman, se ve la evolución de esa tendencia a minimizar a la modelo. Si pudieran creo que sacarían maniquíes teledirigidos por las pasarelas, de todas formas les iban a comprar los modelitos … que importa el soporte … si tiene que ser una mujer, pues que sea un esqueleto, como la pobre chica que murió al par de días de desfilar debido a su anorexia, no recuerdo donde lo leí pero recuerdo que me calentó lo mío también. Al esqueleto le dan 4 brochazos para que resulte de lo más poco mirable y sólo queda la maravillosa obra del diseñador, por llamarle algo.
Seguí intentando calmarme … no he escrito nada en estos días por eso, pensé que la proximidad de mi cumpleaños me estaba afectando, no sabía por qué, yo siempre me los he tomado en plan gran festival, recuerdo uno que empecé a celebrarlo un jueves y acabé un martes …, ¿tanto he cambiado en 300 días y pico?.
Ayer descubrí que no era yo quien había cambiado. Sigo siendo la misma idealista radical que cuando tenía 15 años. Seguía creyendo en el ser humano, en la compasión, en saber antes de abrir la boca para soltar estupideces … en las libertades, en que las urnas mandan tanto si te gusta o no el resultado … en chorradas así … idealista que es una.
Saltó ayer la noticia de una señora asesinada, que era concejal, comenzó una avalancha de los comentarios más vergonzantes que he visto en mi vida. Me dio asco pensar que los que los habían escrito, presuntamente, eran seres humanos. Se alegraban de la muerte de esta mujer, la tachaban de corrupta, sacaban listas de los siguientes que tenían que ser asesinados, pedían que tirotearan al presidente del gobierno … eso se llama Magnicidio, es un delito muy serio, si son tan listos que vayan a preguntarles a los estadounidenses lo que significa que maten a un presidente, justificaban la muerte de esta mujer de cualquier manera.
Hoy ya fue el remate, doña Mari Morada, la concejala gallega que ayer decía textualmente “Quien siembra vientos recoge tempestades” hoy pedía disculpas, si, disculpas a su partido por el daño que pudiera haber ocasionado. ¿Y a la familia de la fallecida quién se las pide Mari Morada?, tu partido por encima de alguien asesinado al parecer por dos locas que se vengaban por una sentencia judicial … ¡¡¡Que asco!!!!
Hoy no hay fotos, ni vídeos, sólo el lazo negro en señal de apoyo a esa familia que ha perdido a un miembro querido. Al resto de desalmados, aprovechados y escoria varia … que les vaya bonito y que la vida les de lo que merecen.
Hasta el siguiente …