La mejor habitación de España para hacer el amor

Por Azdeco @AZDECO

¿Nos preocupamos por cuidar la estética del lugar donde practicamos sexo? La respuesta es sí y, sobre todo, nos gusta que nuestra pareja ambiente y decore el lugar donde vamos a hacer el amor. Consciente de ello, la marca "Control" ha buscado ‘La mejor habitación de España para hacer el amor’ a través de un concurso en una conocida red social en el que ha participado gente de toda la geografía con imágenes de sus habitaciones en las que mostraban como las preparan para disfrutar del sexo con su pareja.


Un jurado experto formado por la educadora sexual Sylvia de Béjar, Rosa Urbano y Gabriel Pfingsten del estudio de decoración e interiorismo Urbano & Pfingsten y Susana Sánchez, Marketing Manager de Control, ha sido el encargado de seleccionar la habitación ganadora, una tarea difícil, pero al mismo tiempo muy divertida para la que ha sido necesario contar con gran sentido del humor.
La mejor habitación de España para hacer el amor ha sido la de José Pintado, un joven gaditano afincado en Madrid, del barrio de Prosperidad, cuya decoración ha sido, según el jurado, la mejor de España entre todas las que han participado. Cuando le llamaron para decirle ‘Tu habitación ha sido la ganadora’ no se lo podía creer. Hoy José es consciente de que su dormitorio será la envidia de muchos. ‘Mi habitación no tiene nada de especial, lo decoré a mi gusto y poco a poco he ido añadiendo detalles que la hacen mi rincón favorito para leer, dormir, descansar, y por supuesto hacer el amor. Me encanta utilizar una luz cálida y sensual, y decorar el ambiente con flores que desprendan un olor agradable’.
Estos y otros aspectos han sido los que el jurado de Control ha tenido en cuenta a la hora de seleccionar su habitación. Colores cálidos y neutros que eviten cualquier distracción, luz natural y un aroma floral han sido algunos de los criterios en los que se han basado Rosa Urbano y Gabriel Pfingsten a la hora de valorar este dormitorio, además de la correcta distribución de todos los elementos y un perfecto equilibrio entre todo ellos.
Para Sylvia de Béjar, educadora sexual, un básico para crear un ambiente adecuado para hacer el amor es jugar con la luz suave e indirecta que disimule los defectos y que deje entrever aquello que la vista no capta, dando rienda suelta a la imaginación y las fantasías. Ambientes poco recargados que dejen que sea la propia pareja quien llene dicho espacio, música de fondo y un aroma que despierte los sentidos, son piezas clave que no deben faltar para disfrutar de una relación placentera en un entorno ideal.
Control también ha querido confirmar mediante un estudio de opinión si realmente la estética es un aspecto importante para los españoles a la hora de hacer el amor. De dicho informe, se extraen resultados muy relevantes como los que se indican a continuación:
¿Cuidan la estética? Independientemente de dónde y con quien viven los jóvenes españoles, a un 51,3% le gusta cuidar siempre la estética del lugar donde practican sexo, mientras que el 48,7% restante no le da importancia. En esta misma línea, a la pregunta ¿te gusta que tu pareja se preocupe por detalles relacionados con la estética a la hora de practicar sexo como la ropa interior, o decorar el ambiente con velas, música, etc?, un 96% afirma que si le gusta, mientras que un reducido 4% afirma que no le gusta nada.
Apagada o encendida A la pregunta de si prefieren hacer el amor con la luz apagada o encendida, el 25% prefiere que no haya luz, un 27% no quiere perderse nada de lo que pasa y prefiere tener la luz encendida o luz natural, y a un 47% le da igual.
¡Dale al play! Música romántica, jazz, rock & roll…, cualquier música es buena para hacer el amor según el 13% de los encuestados. En cambio, un alto porcentaje, 39%, deja la música para otro momento y un 48% restante sólo pone música en momentos especiales.
¿Vives con papá y mamá? Un 35% vive con su pareja, un 49% con sus padres, un 9% comparte piso y un 7% vive solo. Para aquellos que aún viven con sus padres, las posibilidades de tener un dormitorio decorado y ambientado a su gusto se ve limitado por los gustos, de la madre en la mayoría de los casos. Algo que por el contrario no les sucede a quienes viven con su pareja, solos o incluso comparten piso y quieren darle un toque personal.  En cuanto a cómo afecta a las relaciones esta situación, un 93,5% opina que vivir en casa de sus padres afecta considerablemente a la intimidad de la pareja, mientras que un 34% piensa que vivir con compañeros de piso no tiene por qué afectar porque hay más confianza.