En un estudio de la Universidad de Columbia publicado hoy en
la revista PLOS Biologylos autores
indujeron la miopía o la hipermetropía en monos, colocando lentes delante de
sus ojos. Una lente que desplaza el punto focal hacia atrás de la retina induce
la miopía, mientras que una que lo coloca frente a la retina induce la
hipermetropía. Cuando los monos se expusieron al desenfoque de cualquiera de
los dos tipos en un ojo durante 5 semanas, la actividad de los genes en la
retina expuesta cambió en comparación con la retina no expuesta. Las vías
moleculares afectadas fueron en su mayor parte diferentes entre los dos tipos
de desenfoque. Si bien ambos tipos de desenfoque indujeron cambios en
importantes vías de señalización celular, con los puntajes de los genes
afectados en cada caso, solo un pequeño puñado se vio afectado por ambos tipos
de desenfoque. También hubo diferencias en la actividad de los genes a lo largo
del tiempo en cada tipo, con poca superposición entre los afectados en los
primeros 10 días y los afectados después de 5 semanas. Los autores encontraron
que 29 de los genes cuya actividad cambió en respuesta al desenfoque se
localizaron en regiones cromosómicas previamente asociadas con miopía humana,
lo que sugiere que las variaciones en la expresión de los genes involucrados
en la regulación normal de la forma del
ojo en respuesta al desenfoque contribuyen
a la miopía. La identificación de estas vías proporciona un marco para la
identificación de nuevos objetivos farmacológicos y para el desarrollo de
opciones de tratamiento más efectivas para la miopía.