La diabetes es una enfermedad que impide que el cuerpo metabolice la glucosa de forma adecuada. Este exceso de azúcar en sangre puede provocar altos niveles de toxicidad. "En los últimos años, se ha observado que su presencia condiciona una mayor mortalidad hospitalaria, su tratamiento es complejo y objeto de discusión sobre los valores de glucosa en sangre que deben de ser óptimos para el paciente", explica el doctor Fernando Cordido Carballido, miembro de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición y uno de los coordinadores del curso XVI Curso de Endocrinología para postgraduados 2011, celebrado recientemente en Madrid.
El daño que el exceso de glucosa en sangre causa a los riñones se denomina nefropatía diabética. Se calcula que este tipo de patología puede llegar a afectar a entre el 25 y el 40% de los pacientes diabéticos. "Es en este punto es donde reside la relevancia de un buen manejo de la hiperglucemia dentro de los hospitales, al tiempo que se hace necesario un perfecto control de la presión arterial y de otros factores de riesgo vascular", matiza Cordido.
Completar la formación en este aspecto en los R3 y R4 de la especialidad es uno de los objetivos fundamentales de este curso de formación. "Durante estas jornadas se presentan y discuten casos, se realizan talleres prácticos y se incentiva activamente la participación de los médicos en formación en relación a aspectos novedosos, polémicos y de más difícil abordaje dentro de la Endocrinología", asegura el doctor.
-Obesidad: GLP-1 esperanza para el futuro
Otro de los temas tratados durante el curso han sido las principales novedades en el tratamiento de la obesidad. Uno de cada cuatro españoles padece obesidad y en este momento las posibilidades de tratamiento médico son muy limitadas. Asimismo, se ha resaltado el papel creciente de la cirugía como una alternativa muy válida para el tratamiento de la obesidad, "en las indicaciones adecuadas", apunta este experto. "Los fármacos incretín miméticos, como los derivados de GLP-1, que son una nueva familia terapéutica desarrollada para el tratamiento de la diabetes, demuestran una elevada eficacia, -asegura Cordido- representan también una opción futura de tratamiento de la obesidad por su capacidad demostrada para inducir pérdida de peso". El GLP-1 es una hormona con carácter de incretina (hormonas gastrointestinales que estimulan la liberación de insulina), cuyas funciones básicas consisten en aumentar la secreción de insulina por parte del páncreas de manera dependiente de la glucosa, suprime igualmente la secreción de glucagón. "Los fármacos derivados de GLP-1 pueden desarrollar un papel muy importante, debido a su mecanismo dual, ya que además de servir para tratar la diabetes, palia un mecanismo patogénico primordial de ésta como es el exceso de peso" concluye el doctor.
-La importancia de la formación continuada de calidad
"Estar al tanto de estas innovaciones, conocer los avances o las nuevas aplicaciones forman parte del desarrollo profesional del endocrinólogo, y son, en cierta medida, una necesidad para la buena práctica médica". Es en este punto donde reside la importancia de cursos como éste, que ha contado con los mejores expertos de la especialidad y que pretende abarcar todos aquellos temas de la Endocrinología y la Nutrición que causan entre los expertos algún tipo de interés, bien sea por su actualidad, su novedad o bien por que no esté del todo definido su diagnóstico o tratamiento.
Cursos de esta envergadura, o como el Curso en Técnicas en Endocrinología y Nutrición también realizado por la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición el mes pasado, ponen de manifiesto el interés de esta Sociedad por mantener al endocrinólogo en primera línea informativa y formativa de las nuevas tendencias, así como de las técnicas necesarias para llevar a acabo un correcto diagnóstico y tratamiento.