
La entidad considera que existe una “prioridad crítica” para encontrar nuevas armas frente al microbio Acinetobacter baumannii, resistente a los antibióticos carbapenémicos. Esta bacteria fue responsable del peor brote en un hospital español, el que mató a 18 personas entre 2006 y 2007 en el Hospital Universitario 12 de Octubre, en Madrid. En segundo lugar aparece Pseudomonas aeruginosa, también resistente a los carbapenémicos, un tipo de antibióticos de amplio espectro que se utiliza en hospitales por vía intravenosa para intentar atajar infecciones graves.

“Esta lista es una nueva herramienta para garantizar que la I+D responda a necesidades urgentes de salud pública”, ha señalado en un comunicado la médica francesa Marie-Paule Kieny, subdirectora general de la OMS para Sistemas de Salud e Innovación. “La resistencia a los antibióticos va en aumento y estamos agotando muy deprisa las opciones terapéuticas. Si dejamos el problema a merced de las fuerzas de mercado exclusivamente, los nuevos antibióticos que con mayor urgencia necesitamos no estarán listos a tiempo”, ha advertido.
En el segundo grupo de la lista, considerado de prioridad alta, se encuentran bacterias cada vez más resistentes y responsables de enfermedades muy conocidas, como la gonorrea, provocada por Neisseria gonorrhoeae; salmonelosis, causada por el género Salmonellae; y la úlcera de estómago generada por la bacteria Helicobacter pylori.
"Si dejamos el problema a merced de las fuerzas de mercado, los nuevos antibióticos no estarán listos a tiempo", alerta la subdirectora general de la OMS
En la elaboración de la lista de la OMS ha participado la División de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Tubinga (Alemania). Los expertos han basado sus decisiones en el grado de letalidad de las infecciones, en la duración del tratamiento, en la frecuencia con la que aparecen resistencias y en la facilidad de transmisión, entre otros factores.
Gargallo-Viola celebra la aparición de asociaciones internacionales sin ánimo de lucro para buscar nuevos antibióticos, como la formada por la OMS y la Iniciativa Medicamentos para Enfermedades Olvidadas (DNDi, por sus siglas en inglés). “Pero no solo tenemos que conseguir nuevos fármacos, también hay que hacer un uso racional de los que ya tenemos”, subraya. En países como España, el uso irresponsable de antibióticos en medicina y veterinaria ha hecho que surjan cepas multirresistentes. Un reciente estudio internacional ha mostrado que los bebés españoles reciben cada año un 50% más de antibióticos que los alemanes.
Prioridad crítica
1. Acinetobacter baumannii, resistente a los carbapenémicos.
2. Pseudomonas aeruginosa, resistente a los carbapenémicos.
3. Enterobacteriaceae, resistentes a los carbapenémicos, productoras de betalactamasas de espectro extendido (ESBL).
Prioridad alta
4. Enterococcus faecium, resistente a la vancomicina.
5. Staphylococcus aureus, resistente a la meticilina, con sensibilidad intermedia y resistencia a la vancomicina.
6. Helicobacter pylori, resistente a la claritromicina.
7. Campylobacter spp., resistente a las fluoroquinolonas.
8. Salmonellae, resistentes a las fluoroquinolonas.
9. Neisseria gonorrhoeae, resistente a la cefalosporina, resistente a las fluoroquinolonas.
Prioridad media
10. Streptococcus pneumoniae, sin sensibilidad a la penicilina.
11. Haemophilus influenzae, resistente a la ampicilina.
12. Shigella spp., resistente a las fluoroquinolonas.