

Ser de talla pequeña y delgada
Antecedentes familiares de osteoporosis
Tomar ciertos medicamentos (como los corticoides )
Tener osteopenia, que significa, pérdida de densidad ósea.
La menopausia y los desequilibros hormonales pueden agravar la osteoporosis.
Entre los 40 y los 50 años, el ciclo sexual femenino se hace irregular hasta que cesa completamente. Este periodo se caracteriza por la carencia de estrógenos (hormonas sexuales femeninas), lo que lleva consigo unos cambios fisiológicos importantes, entre ellos la pérdida de masa ósea y el riesgo de aparición de osteoporosis.
La osteoporosis es una enfermedad silenciosa. Puede que hasta que no te rompas un hueso no te enteres ni siquiera de que la tienes. Lo mejor es hacerse un éxamen de la densidad mineral ósea (una densitometría ósea).
Una vez que se diagnostica la osteoporosis, la forma principal de tratamiento es el uso de medicación para evitar o retardar la continua pérdida de hueso.
Además de la medicación es conveniente no engordar demasiado para mantener el equilibrio corporal con más facilidad, y hacer ejercicio físico. También la vitamina D es esencial. Es aconsejable tomar un poco el sol (con 10 o 15 minutos cada día es suficiente)
Una actividad física preventiva adecuada es aquella en la que se ejerce algún efecto de carga, como saltar, jugar al tenis, andar y correr. También levantar pesas, bailar, hacer aerobic, subir escaleras o el esquí, son de ayuda.
Los ejercicios que ofrecen una resistencia en los huesos, que exigen un trabajo de éstos, estimulan nuevo crecimiento óseo. Si haces el ejercicio al aire libre y te está dando el sol, mucho mejor, ya que así recibes las dosis necesarias de vitamina D. Más información sobre este tema lo puedes encontrar en este enlace : Noticias de salud. Blog