Cuidar la salud de la boca es importante para toda la población, pero para los diabéticos aún más, según advierten la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA) y la Fundación de la Sociedad Española de Diabetes (Fundación SED). La periodontitis (una afectación de las encías) "puede iniciar o aumentar la resistencia a la insulina igual que lo hace la diabetes", indican.
No es que los diabéticos sean especialmente descuidados. Solo en la franja que va de los 35 a los 44 años, que son los datos que han ofrecido las sociedades, el 85% de los adultos tiene algún tipo de enfermedad bucodental. Un 59.8% presenta gingivitis, y el 25.4% periodontitis.
David Herrera, profesor titular de Periodoncia en la Universidad Complutense de Madrid y vicepresidente de SEPA, asegura que "un gran número de estudios han demostrado que las enfermedades periodontales son más frecuentes y suelen estar más avanzadas en diabéticos (tanto de tipo 1 como tipo 2) respecto a no diabéticos". De igual manera, "estos trastornos de las encías progresan más rápidamente en los pacientes diabéticos y que el mal control de la glucemia en pacientes con diabetes también se asocia con un incremento significativo del riesgo de pérdida de nivel de inserción y hueso alveolar".
Se trata de una influencia de ida y vuelta. La presencia de inflamación en las encías van a repercutir negativamente en el control y riesgo de complicaciones en el diabético. "No solo se ha observado que los pacientes con enfermedades periodontales tienen diabetes tipo 2 con más frecuencia que los individuos con las encías sanas, sino también que la presencia de enfermedades periodontales se correlaciona con un peor control de la glucemia en diabéticos", dice el odontólogo Héctor Juan Rodríguez-Casanovas.