La primera de muchas

Por Masqueudos

Este fin de semana hemos celebrado la boda de Silvia y me encanta utilizar el plural porque, de verdad, ha sido una verdadera celebración. Desde la ceremonia, que tuve el honor de dirigir junto con una amiga de Sara, la otra novia, hasta el baile, la comida del día siguiente o el rato de sobremesa. Todo fue una fiesta.

Así que no es de extrañar, como bien dijo Roskis en un momento de debilidad, que todas queramos que esta sea solo “la primera de muchas”, y que podamos seguir encontrando la manera de juntarnos para celebrar de todo: la vida, la fortaleza, el afán se superación, la valentía, la madurez, las risas y el amor.

Yo, personalmente, cada vez valoro mas a la gente DE VERDAD, aquellos con los que puedo ser yo misma y que también lo son conmigo, sin dobleces, sin imposturas. Los que lloran si tienen que llorar, los que saben pedir perdón y dar las gracias, los que te iluminan la cara cuando te sorprenden con un comentario o con un detalle que no te esperabas. A ellos y mas concretamente a ellas, mis amigas, les dedico esta historia.

¡Os quiero!

Sed felices, Sara y Silvia