Con todo, este blog no puede resistirse a plantear la tradicional quiniela de los Oscar, en el formato de votación más cómodo posible, dispuesto (un año más) a permitir que mis preferencias personales queden por debajo de la realidad y que otros demuestren sus más dotadas capacidades predictivas. No importa: la tradición y la incertidumbre compensan la experiencia.
¡Ánimo y suerte con tu quiniela!