Y, mientras, él aprovechaba las ausencias para vivir nuevas expectativas que no le produjeran agobio. Sus reflexiones eran más del estilo, necesito pasión en mi vida, no creo que sea el momento de tener una relación seria, ¿y si me estoy perdiendo algo mejor?, no estoy seguro de estar enamorado….
Personas autosuficientes, independientes que viven las relaciones desde la distancia porque el compromiso que se adquiere en la relación de pareja les produce agobio, preocupación por la pérdida de libertad y el exceso de responsabilidad. Son aquellos que aman la idea que tienen de la persona y no a la persona en sí. Me enamoro (eso creo) y lo doy todo, pero cuando la relación avanza me bloqueo, me siento asfixiado, y cuánto más me controlas más ganas tengo de huir.
Y acaban huyendo….. porque es la única manera de arrancarse esa opresión. Y, entonces dudan, quizás no estoy enamorado, quizás no la amo… Pero tranquilidad que, al poco tiempo vuelven. En la distancia valoran lo perdido (y aún más cuando la pareja les permite vivir como quieren), magnifican el amor que sienten, se apodera de ellos la nostalgia del tiempo vivido, y como ave fénix, irrumpe de nuevo en tu vida… hasta que vuelvan a angustiarse de nuevo y decidan, como siempre, huir.
¿Acaso reconoces alguna relación así? Si la has tenido y ya has pasado página te felicito. Si estás inmersa en una relación de este tipo se te aproxima tormenta emocional. Busca ayuda y toma decisiones pero no esperes, bajo ningún concepto, que la relación cambie a mejor.
* se utiliza sólo el género masculino para que su lectura sea más ágil, pero entiéndase que es aplicable a ambos sexos.