Las bombas de calor para piscinas son ecológicas, porque usan energías renovables y económicas, porque son sistemas que optimizan al máximo los recursos naturales que utilizan. En principio, las bombas de calor para piscinas funcionan transformando el calor del aire en energía que aumenta la temperatura del agua de la piscina, pasando a través de un compresor donde se condensa. Es un sistema sencillo, muy eficiente y que requiere un mínimo gasto de electricidad.
Pero, también existen bombas de calor geotérmicas que se utilizan en la climatización de piscinas. En este caso, la fuente de la que toman el calor no es el aire, es el subsuelo. Y es que, el subsuelo mantiene una temperatura constante de unos 15 grados, sea cual sea la temperatura exterior y en todas las épocas del año.
Las bombas de calor geotérmicas aúnan muchas ventajas. Aprovechan una fuente de energía inagotable y son sostenibles, porque no causan ningún efecto negativo en el subsuelo que es de donde la extraen. Además, las bombas de calor geotérmicas son muy cómodas ya que su funcionamiento es automático y no generan ruidos, olores u otras molestias.