El servicio de teleasistencia lo venía realizando Cruz Roja, que ganó el anterior concurso público, mediante un contrato con la Administración, ahora se ha procedido a realizar un nuevo concurso público de adjudicación. La gestión pasará a la empresa que haya obtenido mejor resultado en los baremos presentados públicamente, según se indica en nota de prensa de la Junta.
Se han presentado ofertas por parte de seis entidades que trabajan en el ámbito social, entre las que se encuentra Cruz Roja. Desde la Junta castellano-manchega se informa que el Ejecutivo se compromete a mantener el mismo nivel de asistencia que se tenía hasta ahora y el nuevo contrato aportará un notable ahorro, ya que todas las ofertas presentadas rebajan el coste anterior.
El nuevo servicio de teleasistencia contemplará tres tipos de usuarios: dependientes, no dependientes y privados. En el caso de los dependientes no pagarán nada aquellos que estén por debajo del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) --menos de 532 euros--, mientras que los que superen 1,5 veces el este indicador pagarán el 90% del coste del sistema.
Por su parte, los usuarios no dependientes pagarán como mínimo 4 euros y como máximo 11 euros, en el caso de que estén por encima de 1,5 veces el IPREM. Todos los demás usuarios "privados" que soliciten este servicio pagarán el importe íntegro del servicio.
El servicio de teleasistencia se inauguró en la región en 1989 gracias a un convenio con Cruz Roja y en la actualidad cuenta con 54.500 usuarios a través de más de 38.000 terminales de teleasistencia domiciliaria.