La Comisión Europea considera una prioridad la potenciación de la telemedicina como una de las necesidades urgentes de los actuales sistemas europeos de atención sanitaria.Una necesidad que permitiría reducir los elevados costes del actual sistema pero también, mejorar su eficacia y un mayor control sobre los cuidados prestados y una atención más personalizada.La telemedicina tiene un gran potencial de crecimiento y pese a la crisis económica, el mercado mundial de la telemedicina ha pasado de los 7.588 millones de euros en 2010 hasta8.982 millones de euros en 2011, mientras que el mercado de las aplicaciones sanitarias digitales podría crecer en unos 17.500 millones de euros de aquí al 2017.La UE está estudiando invertir unos 8.000 millones de euros del presupuesto europeos para 2014-2020 para apoyar la investigación y el desarrollo de la telemedicina en las áreas de medicina personalizada, analítica avanzada, telemonitorización y aplicaciones móviles.En 2013 se realizará un estudio de la legislación actual de los Estados miembros para emitir recomendaciones sobre los aspectos legales que permitirán el desarrollo de la e-salud.La realidad actual en el marco de la UE indica que queda mucho por hacer, ya que sólo el 4% de los hospitales públicos o privados da acceso al historial médico del paciente a través de Internet. Sólo un 30% prescribe recetas electrónicas y sólo un 8% realiza la telemonitorización de sus pacientes crónicos.La telemedicina es vital para reducir costes en los sistemas de salud y ahorrar visitas innecesarias de pacientes a los hospitales. Según los datos de la UE, la telemedicina podría mejorar un 15 por ciento la tasa de supervivencia de los pacientes y reducir un 26 por ciento el número de días que un paciente requiere de hospitalización.