Las acciones de la comunicación se dan simultáneamente. En ella, no existe el hablar sin
el escuchar y viceversa. Entre ambas crean una danza a la que llamamos Conversación.
En tu vida personal y en tu actividad, todo lo que sucede, todo el tiempo, es una
Conversación.
Conversás con vos… Conversación Interna
Conversás con otros…Todo el tiempo. Mediante ella, vas creando con ellos la realidad
que comparten.
Conversaciones que crean tu realidad laboral.
Conversaciones que crean tu realidad amistosa.
Conversaciones que crean tu realidad amorosa.
La vida es una conversación.
En el conversar construimos nuestra realidad con el otro. No es una cosa abstracta.
El conversar es un modo particular de vivir juntos en coordinaciones del hacer y
el emocionar. Por eso el conversar es constructor de realidades. Al operar en el
lenguaje cambia nuestra fisiología. Por eso nos podemos herir o acariciar con las palabras.
Humberto Maturana
¿Cuál es la importancia de tener esto claro?
Este es el gran aporte de la Ontología del Lenguaje porque al considerar que todo es una conversación, podemos intervenir en muchos ámbitos con solo cambiarla.
El sufrimiento -postulamos- vive en nuestra conversación y en la interpretación que hacemos de lo sucedido. Sin dicha conversación no existiría el sufrimiento que, a diferencia del dolor que es biológico, es lingüístico y vive en nuestro relato, permitiéndonos aumentar nuestro poder al intervenir en esos espacios que nos quedan a partir de nuestras interpretaciones.
El Coaching Ontológico con el aporte de la Ontología del Lenguaje, es una herramienta fundamental para mejorar nuestra capacidad de respuesta eligiendo las acciones que nos van a convertir en la persona que necesitamos ser, para concretar nuestros sueños.
Si podemos adoptar la mirada de que vivimos en mundos interpretativos, podemos visionar que los problemas que nos afectan y nos hacen sufrir no dependen de los hechos del mundo externo, sino de las interpretaciones que tenemos de nosotros mismos y del mundo.
Cuentan que un día Picasso se encontró en la calle con una personan que le preguntó:
-¿Por qué usted no pinta lo que se ve?
A lo que Picasso respondió:
-Yo pinto lo que yo veo que seguramente, es distinto a lo que usted puede ver.
Gran parte de los problemas de efectividad y sufrimiento que enfrentamos en el mundo actual (de las organizaciones y en la vida personal) está relacionado con incompetencias que presentamos en la forma de conversar y relacionarnos con otros… Muchas personas sufren por su incapacidad de ser escuchados, por su dificultad para reclamar o su dificultad para reconocer el trabajo de otros. Julio Olalla
¿Cómo son tus conversaciones?
¿Chequeás la escucha? ¿Te cerciorás de estar diciendo de manera que el otro comprenda?
Querés algo… ¿Lo decís en voz alta y te enojás si nadie responde? ¿Crees que lo pediste?
¿Qué te parece? ¿Será importante que aprendas a comunicarte (escuchar-hablar) si en este acto de la conversación estás creando tu realidad?
Dos amigos salen de la iglesia y uno de ellos pregunta en voz alta, si él podría fumar mientras reza.
El otro le dice: ¿Por qué no le preguntamos al cura?
Volvieron y uno preguntó ¿se puede fumar mientras se reza?
Y la respuesta fue: No, no, hijo, de ninguna manera. Eso va contra todo lo que tu religión enseña.
Entonces el otro le preguntó: ¿se permite rezar mientras uno fuma?
Por supuesto, hijo, por supuesto.
Las conversaciones pueden ser espontáneas pero también pueden surgir a raíz de un quiebre
Todo quiebre genera en nosotros la aparición de diversas conversaciones y el camino que ellas tomen serán la clave para hacernos cargo de los quiebres. Hay conversaciones que nos dejan parados en el quiebre, y otras que se hacen cargo de superarlo.
Las conversaciones establecen las características de una relación. Tus relaciones serán la consecuencia directa de tus conversaciones, es decir, de tu forma de hablar y escuchar.
¿Qué importancia le das a la elección de la conversación que te surge luego de un quiebre? ¿Contestás lo primero que te sale? ¿Escuchás al otro con todo tu ser?
-Mario necesito hablar con vos
-Si
-Mario ¿me escuchás?
-Si
-Pero que te pasa ¿estás sordo? – Necesito hablarte ¿me escuchás? MAAAARIOOO!!!!!
-Pero sí Susana, te estoy escuchando, ¿qué te pasa a vos que no me escuchás a mí cuando te contesto? ¿Qué querés?
-Nada, ahora no quiero nada. Con vos no se puede hablar. Siempre estás de ese humor para conversar conmigo. ¡Cada vez estamos más incomunicados!
¿Te trae algún recuerdo esta conversación?
Tengo una muy buena noticia. A conversar se aprende. Una conversación se puede diseñar de manera de obtener de ella el mejor de los resultados, pero de eso te voy a hablar en mi próximo post.
Te regalo para que lo tengas con vos…
Hablo porque conozco mis necesidades,
dudo porque no conozco las tuyas.
Mis palabras vienen de mi experiencia de vida.
Tu entendimiento viene de la tuya.
Por eso, lo que yo digo y lo que tu oyes,
puede no ser lo mismo.
Por lo que si tu escuchas cuidadosamente,
no sólo con tus oídos, sino también con tus ojos y tu corazón,
puede ser que logremos comunicarnos.
Herbert. G.Lingren
Por el placer de compartir.