La administración de vitamina B3 o niacina aumenta los niveles de lipoproteínas de alta densidad, pero no previene el infarto de miocardio o accidente cerebrovascular en pacientes que consumen estatinas para reducir el colesterol.
Estas son las conclusiones de una investigación estadounidense financiada por el Gobierno de los Estados Unidos. En el estudio, los pacientes eran tratados con ácido nicotínico de liberación prolongada y una estatina, la simvastatina.
"Aunque no conseguimos el beneficio clínico esperado, respondimos a una pregunta científica importante sobre el tratamiento de la enfermedad cardiovascular", indica la directora del Instituto Nacional de Corazón y Pulmón de Estados Unidos, Susan Shurin.