La naturaleza es una de las fuentes de inspiración de Behive, cuyo nombre deriva del inglés beehive,
colmena: la lámpara con una forma amplia y con volumen, es sensual y elegante al mismo tiempo. Formada por una serie de anillos superpuestos de distinto diámetro, Behive en la versión de mesa se ha convertida ya en un clásico, gracias al inimitable efecto luminoso y a la síntesis perfecta de investigación tecnológica y pureza formal. Se propone actualmente en la nueva versión de suspensión, que ofrece una luminosidad cálida y suave como en la Behive de mesa, a la que añade una luz directa hacia abajo. Un escudo difusor situado en el interior, esconde a la vista los componentes técnicos y permite que la fuente luminosa ilumine hacia abajo. La luz blanca asume de esta forma un doble valor, destaca la peculiaridad gráfica de los anillos y focaliza la iluminación sobre un área concreta. Behive se confirma, incluso en la nueva versión, como una lámpara poética y emocionante, de forma pura, icónica y técnicamente perfecta, que se transforma en una referencia visual, un foco de luz que se proyecta en cualquier ambiente.