¿Una lámpara puede fascinar incluso apagada por el juego de luces y sombras que la animan?
Innerlight es un cuadro tridimensional que cambia de significado y función cuando la lámpara está encendida. El haz luminoso que rebota sobre la pared destaca los contornos y define la forma de la lámpara, inspirada en las esculturas de Richard Serra. Se crea de esta forma un refinado juego de sombras y reflejos, mientras la luz se propaga desde el interior (de donde proviene el nombre Innerlight) de cada una de las tres bandas, difundiéndose en diversas direcciones. La fuente luminosa, formada por dos lámparas fluorescentes colocadas en planos distintos, garantiza una buena iluminación en todas las direcciones, tanto hacia la pared como hacia las placas, con un efecto cambiante y sofisticado. Innerlight se encuentra disponible en dos versiones: blanca, que ve la luz protagonista en su pureza, o en otro acabado especial, que destaca su profundidad. Adecuada tanto para los ambientes domésticos como para las soluciones contract, Innerlight revela en cada situación su doble personalidad: escultura de pared y lámpara, siempre caracterizada por un estilo esencial, decidido y por una sobria elegancia.