Lancer Evolution VIII: Construido para ser el más rápido

Por Alberto @Freshimports

Supongo que estoy en lo cierto cuando digo que muchos hemos empezado en este mundillo con coches de segunda mano, yo mismo me puedo incluir. Pero siempre que vamos a comprar un coche que ha pasado por otros propietarios nos entra la duda… ¿Lo habrán cuidado bien? ¿Habrá tenido algún siniestro? … me da miedo pensarlo.

Precisamente, el caso de Fran debe ser de los pocos. Él conoce la realidad del pasado de su Mitsubishi Lancer Evolution VIII. Cuando fue a recogerlo a Murgadella le explicaron toda su historia y le fueron enseñando una a una las soldaduras y marcas de modificaciones que alguna vez estuvieron ahí, como si de cicatrices de guerra se tratasen… Marcas de barras antivuelco, cierres de seguridad… Además no era nacional, ¡este Lancer Evolution VIII estuvo corriendo en Rallys de Bélgica!

Fran fue como muchas personas que deseaban tener una moto a los 16… Pero no pudo ser y tuvo que esperar hasta los 18 para obtener su carnet de conducir. La ausencia de una moto durante esos 2 años le hicieron hervir la sangre y se aficionó por los coches… Quería/necesitaba algo rápido para desahogarse.

Empezó por un MG ZR160, después se pasó al Civic Type R y por último, quería algo con turbo… Su afición a los rallys y la recomendación de amigos suyos le hicieron ver el Mitsubishi Lancer Evolution VIII de una forma distinta… Fue a por él con todo el sacrificio que eso conlleva.

Seguramente ya conocéis el motor 4G63 del Lancer Evolution VIII, hemos hablado de él en alguna ocasión. Un motor que ofrece muchas posibilidades y con un gran volumen de piezas aftermarket para exprimirlo al máximo.

Lo que se esconde debajo del capó de este Lancer Evolution VIII

Concretamente, este Lancer Evolution VIII monta una ECU Link G4 + P&P instalada por GMCSport, una electroválvula Anti-Lag, un escape completo en 3″, filtro K&N, Bomba de gasolina Walbro, Bujias NGK, Válvula de descarga HKS, Turbo de Lancer Evolution IX y protector de colectores TOMEI. Todo esto, se ve traducido en potencia a 386cv de potencia y 461 de par máximo.

Una potencia que empieza a ser seria, que requiere el control y el estado de todos los componentes en todo momento. Es por ello que Fran instaló cinco relojes en su Lancer Evolution VIII para controlar la presión del Turbo, la temperatura de aceite, la presión del aceite, la temperatura del escape y un TurboTimer.

En cuanto al exterior, os habréis dado cuenta que los parachoques no corresponden a la version de Lancer Evolution VIII. Fran montó a posterior los parachoques del Lancer Evolution IX para darle un “look” estético más actualizado. Las aletas son Vortex de +35mm. Las ópticas delanteras y traseras también son del EVO IX.

Las llantas son unas Japan Racing JR-11 y montan unos Bridgestone Potenza S-02. Con tanta potencia es indispensable contar con un buen juego de gomas para asegurar una buena tracción si no queremos salir disparados en la entrada de cualquier curva… Recordad que los frenos, la suspensión (en este caso una Blistein B16) y elementos de refuerzo como la barra frontal Cusco de este Lancer Evolution VIII son elementos importantes, pero sin una buena goma que se adhiera bien al terreno, estos componentes no nos servirán para mucho si lo que buscamos es ir rápidos… ¿y quien no quiere ir rápido con semejante potencia bajo el capó?

Las sensaciones son totalmente radicales, el mejor momento empieza en el soplo del turbo… es ahí cuando notas que no puedes despegar tu cuerpo del asiento. Además… para cualquier amante del turbo, ese silbido característico es como un canto para nuestros oídos. El hormigueo que sube por el estomago es similar al que sientes en al descender de una montaña rusa… y perdonadme la vulgaridad pero… ¡acojona!