Además de la oficial misión evangelizadora que sirvió como excusa para la colonización de América, otros motivos oficiosos movieron a aquellos primeros colonizadores españoles: el oro y la plata que abundaba en la vasta región. La mayoría fue tallado a mano y convertido en preciosas joyas coloniales que posteriormente embellecían con una amplia variedad de piedras preciosas encontradas también en la zona.
Esmeraldas procedentes de Colombia, coral encontrado en Méjico o perlas extraídas de la recién colonizada Venezuela sirvieron para adornar las joyas expuestas en la exposición recomendada de este mes: Glitterati. Portraits & Jewelry from Colonial Latin America, que permanecerá abierta en Museo de Arte de Denver hasta el 27 de noviembre de 2016.
El propósito de tan deseadas joyas no era otro que mostrar el estatus y grandiosidad de aquellos españoles que habían decidido trasladar sus hogares a Latinoamérica, en busca de aumentar su riqueza. La vida en el Nuevo Mundo habría de ser lujosa, o al menos, mostrarlo así.
Tanto mujeres como hombres posaban una y otra vez para famosos pintores de la época engalanados con sus mejores galas y luciendo sus piezas de joyería más llamativas, como elaboradas tiaras, collares con ostentosos colgantes o voluminosos pendientes cargados de oro. Pero el mostrar la riqueza – que muchos realmente no habían conseguido – no sólo era potestad de las mujeres. Los hombres lucían también orgullosos sus engalanados sombreros, anillos o cierres de cinturones con piedras preciosas incrustadas.
Y aunque su misión encomendada era predicar el Evangelio y convertir a cuantos más habitantes de la zona al Cristianismo mejor, los sacerdotes enviados a las colonias fueron también retratados con cruces y rosarios de oro macizo, así como las monjas posaron con broches de plata u oro labrados a mano con miniaturas de la Virgen María y otros Santos.
Y lujosa era también la forma en la que guardaban estas valiosas piezas: cajas con decoraciones incrustadas y lacadas a mano servían para salvaguardar sus riquezas… y su recién alcanzado estatus.
La exposición, que muestra todas estas joyas así como muebles y retratos cedidos por la Colección Colonial Española, puede visitarse de martes a domingo en el Denver Art Museum hasta noviembre de este año. Podéis consultar más información en la web del museo.