Las ocho peores cosas que le haces a tu piel

Publicado el 16 marzo 2015 por Modaesmoda @_AbigailCampos

Nos quejamos de que la edad no perdona, pero a veces nuestro peor enemigo somos nosotros mismos. Estas son las ocho peores cosas que le haces a tu piel.

Error 1. Tocarte los granitos

Es de las peores cosas que le puedes hacer a tu piel porque, por inofensivo que parezca, puede causar daños irreversibles en el rostro, en forma de cicatrices o manchas, que pueden quedarse durante meses e incluso para siempre.

Quizá te hayas dado cuenta de que cuando manipulas un grano porque se te hace insoportable salir así a la calle, ese mismo día, a las pocas horas, te vuelve a salir e incluso más grande. Esto se debe a que esa manipulación que has hecho, cuando lo has explotado y crees que lo has vaciado, en realidad has provocado una inflamación superior a la que había de entrada.

Imagen Suus Wansink : Foter : CC BY

Error 2. Exfoliar demasiado

Hay que hacerlo, por supuesto… ¡pero no todos los días! Lo ideal es que si te aplicas un exfoliante, dejes al menos dos días entre medias para volver a utilizarlo de nuevo. La exfoliación retira las células muertas que se van acumulando en la superficie de la epidermis. Si exfoliamos todos los días, impediremos el crecimiento saludable de las nuevas células y conseguiremos una piel irritada y enrojecida, propensa a las arrugas y desprovista de protección.

Error 3. Pasarte con el agua

La piel está recubierta de una película hidrolipídica, una emulsión de agua y grasa que está en la epidermis y que la permite ser más flexible, al tiempo que la protege del ataque de bacterias y hongos.

Si lavamos la cara con demasiada frecuencia o lo hacemos con jabones poco adecuados, podemos alterar su pH, alterar su estructura, provocar que se reseque y se cuartee, hacerla más propensa a problemas inflamatorios (rojeces, eccema) y favorecer su envejecimiento.Hay que limpiarla por la mañana y por la noche y utilizar limpiadores adecuados y no te olvides de la hidratación.

Error 4. No cambiar los productos con la frecuencia que debieras

No se trata solo de que varíes tus tratamientos en función de la época del año (en ocasiones necesitamos más hidratación, en otras lo que prima es la protección frente al sol, en otras la exfoliación…) sino que los productos de cosmética tienen una fecha de caducidad (pincha aquí para saber más) que a veces nos saltamos a la torera.

Error 5. Maltratar la piel del contorno del ojo

El grosor de la epidermis, la capa más externa de la piel, es diferente según la zona del cuerpo. En la cara es de 0,02 con excepción de la del contorno del ojo, que es cinco veces  más fina y su espesor se queda en 0,004 mm.

Es por tanto la piel más delicada del cuerpo y una de las primeras en acusar los signos de la edad. No la estires al maquillarte la línea del ojo o al desmaquillarte para quitarte los productos. Aplícate la crema del contorno del ojo a pequeños toquecitos, sin arrastrar,

sin hacer demasiada presión y preferiblemente utilizando el dedo anular, porque es el que menos fuerza tiene.

Error 6. Fumar

El tabaquismo provoca un envejecimiento prematuro en la piel, deshidratación y un cutis de tono gris y sin luminosidad, debido a la menor oxigenación de las células. Las arrugas que aparecen antes son diferentes, más estrechas pero más profundas.

Error 7. Exponerse al sol sin protección

No se trata solo del riesgo de cáncer, sino de favorecer la aparición de manchas, arrugas, rejoices e imperfecciones. Cualquier rayo de sol, a cualquier hora del día, incluso en días nublados, puede causar daños en la piel, incluso aunque estés en el coche, en casa o en la oficina, porque las radiaciones son capaces de atravesar las ventanas.

No se trata solo de ponerse fotoprotectores cuando vamos a la playa o a la piscina en verano. Se trata de incluirlos en nuestra rutina diaria de cuidados beauty todos los días.

Error 8. Pasar de todo

Marcharte a la cama sin desmaquillar, aplicarte la crema un día sí y otro no, no usar fotoprotector, no lavar el rostro por la mañana… Cualquier excusa es buena para descuidarse, pero dicen que una rutina se convierte en un hábito una vez que se repite.

Un estudio británico realizado en el University College de Londres demostró que en concreto se necesitan 66 días para que se cree un hábito y pueda mantenerse durante años. Piensa en esforzarte durante dos meses, cuidado tu piel a diario, mañana y noche… Y pasado ese tiempo no será un esfuerzo porque lo habrás incorporado a tu vida.

Morning Cleanser de Eve Lom, un limpiador suave que respeta el pH de la piel.

Exfoliante Ami_Iyok, retardador de los signos de envejecimiento.

Cepillo Clarisonic en color melocotón, de la nueva colección Nautical Summer.

Crema preciosa contorno de ojos y labios de Archangela, específica para frenar los signos de la edad.

Pure Cleansing de Juvena y Morning Time Cleanser de Eve Lom.

Loción fotoprotectora diaria ultraligera 50+ de Kiehl’s.