Las que me conocéis ya sabéis que me encanta reciclar latas!!!
Con un poco de pintura, una lámina, un sombreado y un salpicado, dos manos de barniz mate y tenemos una lata la mar de bonita.
Lo primero fue dar dos manos de imprimación a la lata para que la pintura agarre.
Una vez seca, dos manos de pintura, esta vez utilicé el verde mint que me encanta y le iba genial a la lámina.
Alrededor de la lata por arriba y abajo pinte los bordes con un color teja a juego con el envejecido que tenía la lámina.
Una vez pegado el dibujo, dejamos que seque.
Luego hice un sombreado al lado de los bordes y alrededor de la lámina.
También le hice un salpicado todo alrededor, encima de la lámina también.
Dos manos de barniz mate y ha quedado una lata muy bonita.
Espero que os guste tanto cómo a mi.