Otra vez vengo a enseñaros otra lechera. Esta vez repito motivo porque a los clientes es la que les gustó.
Se pusieron en contacto conmigo Juancar y Alícia porque tenían ganas de personalizar una lechera que tenían. Ellos vienen de una familia de ganaderos y saben bien la labor de estas joyas que hoy en día ya se usan prácticamente de decoración y que cuesta tanto encontrar.Esta vez quedamos casi en casa porque son también de Bilbao, así que quedamos, nos conocimos y enseguida congeniamos.
Tenían claro que querían la del Burrito, solamente que el tono lo querían en rojo cereza. Y así fue, dicho y hecho, diez días después quedamos para dársela y les encantó. Para mí es lo mejor, ver que los clientes están satisfechos y que se van con una sonrisa de oreja a oreja...bueno, y además nos fuimos a tomar algo para celebrarlo. Una pareja encantadora, que van a llevar a su pueblo Espinosa de los Monteros en Burgos a su querida lechera!!!