LEÍ
El testamento francés es una novela de Andrei Makine y llegó a mis manos gracias a una gran proveedora de libros y amiga de la casa, Laura Fantuzzi. Ella me lo recomendó a sabiendas de mi gusto por ciertas prosas elegantes y sutiles. No se equivocó! Este libro es una oda al amor que los rusos siempre han tenido por la cultura francesa y toma la forma de un sin fin de recuerdos transmitidos de una abuela a su nieto. Plagado de sensibilidad e imágenes vívidas sobre la exquisita y lejana Francia así como también sobre la fría y solitaria Rusia, el relato se vuelve una evocación permanente, y pese a que la trama es ínfima; son los detalles los que hacen de la lectura, un placer absoluto. Lo amé!
El ruiseñor es una novela ambientada en Francia, durante la Segunda Guerra Mundial. Kristin Hannah elige hablar de ese tiempo atroz a partir de la historia de dos hermanas que transitan dicho período de manera diferente pero con igual dolor y compromiso. Es una novela muy interesante y lo mejor es que no apela a golpes bajos pese a que podría ser una tentación frente a un tema semejante. A través de las decisiones de estas protagonistas vamos conociendo el papel -injustamente silenciado- de la resistencia femenina durante la ocupación nazi. Me encontré llorando en varios pasajes del libro, lo cual demuestra que el relato puede tocarnos el corazón.
Seda de Baricco, un clásico a estas alturas. Se trata de un relato magistralmente escrito sobre el amor; ese que llega sin ser buscado y deja huella para siempre. Con la seda como excusa y una misteriosa mujer como motivo real, la historia es un eterno ir venir con el Japón del siglo XIX como escenario principal entre cuentos de burdeles y gusanos. Una joyita!
La mujer de la libreta roja me encantó. Es la última novela de Antoine Laurain que narra la historia de un hombre que tras encontrar un bolso abandonado se obsesiona con dar con el paradero de su dueña seducido por las anotaciones de la libreta que da nombre al relato. En una tarea casi detectivesca, Laurent busca a la dama en cuestión aunque ello implique cruzar los límites. Citas a otros escritores, una trama rica en detalles y frases de gran inteligencia hacen que la lectura sea un placer absoluto; tanto que no se puede parar hasta el desenlace. Muy recomendable.
LEO
Aún no me acostumbro a la partida de Leonard Cohen. Sus canciones están clavadas en mi playlist favorita y con cada escucha siento que me habla, que me cuenta sus tristezas y sus miedos; que comparte conmigo las penas de amor y el desengaño de tantos años vividos. Será por eso que Amore me regaló este libro biográfico que más que una compilación de datos e información sobre su enorme trayectoria, es un relato antropológico de la cultura occidental de la segunda mitad del siglo XX. Con una profusa investigación sobre los comienzos y las vueltas de la vida del genial artista, Harvey Kubernik recorre los años de búsqueda ética y estética de Leonard. Toma palabras de otros biógrafos, de sus colegas, de los que se vieron inspirados por él y muchas frases y pensamientos del canadiense que nos enamoró a tod@s con sus poesías profundas y una voz que parece surgir de lo más hondo de su alma. Leer este libro es no solo adentrarse en su mundo; también nos permite espiar cómo era la vida en el Chelsea Hotel, los movidos e intensos años 60's y 70's, la cultura pop y todo lo que nos dejó el siglo pasado. Voy despacio porque mi alma de historiadora me pide atención y registro de cada dato.
LEERÉ
En agosto y con motivo de mi cumpleaños, mi amiga Valeria me regaló dos libros: uno de poesía -y de su autoría- Las formas del día y la novela El fin de los días de Jenny Erpenbeck. El de Vale lo leí y disfruté en un viaje a Mar del Plata, la delicadeza de sus versos y la sensibilidad y nostalgia que encierran me llegó al alma. El otro aguarda paciente en mi mesa de luz y es el siguiente en el turno de lecturas para el verano. Ya les contaré qué tal es.
Bueno, en esto estoy; y ustedes? ¿Qué leyeron, leen y leerán? Cuenten, amig@s; compartamos recomendaciones.Buena semana!