2.10.2003 fue el día en el que todo cambió para Diletta Mair.
El día en que se dio cuenta de que había algo más, de que los ángeles existían y no eran como ella creía, de que el infierno era real y los demonios lo poblaban, de que quien la condenó era el único que podía salvarla y de que se había transformado en aquello que más temía. El 2.10.2003 no fue un día corriente. Fue el día en que Diletta Mair murió.