Lilly, la sexta mejor empresa para trabajar en España, según Best Workplaces 2012, y la única entre los diez primeros puestos en todas las ediciones del ránking

Por Fat

Lilly, una de las diez compañías farmacéuticas líderes del mundo, es las sexta mejor empresas de más de mil empleados para trabajar en España, según la lista Best Workplaces España 2012, hecha pública ayer, y basada en la evaluación y valoración de los empleados de más de 250 empresas de todos los tamaños y sectores de España. Lilly, que sube dos puestos con respecto a 2011, se reafirma como la única compañía que desde que comenzase este ranking en 2003 está entre las diez primeras posiciones. Juan Pedro Herrera, director de Recursos Humanos de Lilly, ha mostrado su satisfacción por el resultado. “Estar por décimo año consecutivo entre las diez primeras empresas para trabajar y mejorar, además, nuestra posición con respecto al año pasado es muy importante  para todos los que formamos parte de Lilly. Este resultado refleja, por un lado, la apuesta continua y el compromiso de la compañía con el desarrollo profesional y personal de los empleados y, por otro, el reconocimiento por parte de nuestros empleados de los esfuerzos que se están realizando”, ha comentado Herrera quien considera que “lo realmente importante para nosotros, es la continuidad porque alcanzar un buen puesto en una edición puede responder a un acontecimiento concreto, el reto es permanecer y en Lilly lo estamos consiguiendo”. Los empleados, un pilar fundamental para Lilly Para Lilly los empleados son un pilar básico en su camino hacia la excelencia, y por eso tiene un fuerte compromiso con su bienestar y desarrollo profesional.  A lo largo de los años, la compañía ha puesto en marcha una serie de políticas dirigidas a garantizar la igualdad de condiciones (adhesión al Charter de la Diversidad), favorecer la conciliación familiar (flexibilidad de la jornada, premios económicos por natalidad y nupcialidad,…), fomentar la comunicación activa (encuestas periódicas, encuentros informales entre supervisores y colaboradores…), otorgar beneficios extra salariales (seguro de vida, plan de pensiones, complemento de las prestaciones a la seguridad social…) y asegurar la accesibilidad y el bienestar de los empleados. Junto a estas políticas, destaca el compromiso de Lilly con el desarrollo profesional de la plantilla, para lo que cuenta con planes formativos orientados a potenciar los conocimientos técnicos y habilidades de los empleados. A nivel global, en 2011, la compañía ofreció a sus trabajadores un total de 60.532 horas de formación en diferentes disciplinas. A esto hay que sumar la apuesta que se está haciendo por el Voluntariado Corporativo, con el que, a través de proyectos que tienen un impacto positivo en la sociedad, ofrece a sus trabajadores la oportunidad de potenciar su lado más solidario, con recursos y actividades facilitados y propuestos por la empresa.  Ejemplo de esta apuesta es el programa “Conecting Hearts Abroad”.  A través de este programa, la compañía envía a 200 empleados de Lilly a ayudar a personas y comunidades que carecen de los recursos más básicos en los países más pobres del mundo. Cuatro empleados de la afiliada española participaron el pasado año y en el 2012 participarán otros tres.