El 2015 comenzaba imparable. Durante el mes de enero, la revista NOEmeLIA me entrevistaba en la primera edición del año coincidiendo con su aniversario. Cuatro páginas en las que además de hablar de bodas, pudísteis conocerme un poquito mejor.
Casi al mismo tiempo, Mr Sweet y yo volábamos destino Marrakech un viaje que llevábamos mucho tiempo queriendo hacer. El día antes a nuestro regreso,vi cumplido otro de mis sueños.
Hoy, 12 meses después, ultimamos los detalles de nuestra boda, una boda pequeña e íntima en esta preciosa finca situada a escasos metros de de la casa de mis abuelos, donde me pasé los mejores veranos de mi vida
Llegó la primavera y con ella, volvíamos a hacer las maletas aunque esta vez, el viaje era mucho más largo. Tras cinco años trabajando en Alemania nos mudábamos de vuelta a España. Tomamos la difícil decisión de abandonar nuestros respectivos puestos de trabajo y perseguir un sueño. Por mi parte, después de haberme asomado profesionalmente al mundo de las bodas, quería zambullirme de lleno en él. Mr Sweet, licenciado en Sports, Business and Law y con un Master en Ecología del deporte y Deportes al aire libre, saltaba del despacho de Marketing de una gran empresa a pasar las noches en vela entre planes de viabilidad, leyes, estatutos, reformas y boletines oficiales. En el mes de mayo, escuchamos un maullido en el parking de la playa. Siguiendo el rastro de aquel quejido, encontramos una pequeña gatita atrapada en el motor de un coche aparcado. Así, sin esperarlo, llegaba a nuestras vidas, lo más bonito del mundo, nuestra Kia ¿adivináis de dónde viene el nombre?
También en el mismo mes de mayo, tuve la oportunidad de viajar a Barcelona para asistir como blogger acreditada a la Barcelona Bridal Week. Un experiencia absolutamente ¡inolvidable!
En septiembre, gracias a mi amiga y compañera Marta, tuve el privilegio de decorar una la primera editorial de Rosa Clará en Gran Canaria.
Poco tiempo después, descubrimos una pequeña comuna de gatitos callejeros al final de nuestra calle (vivimos en una calle sin salida). En un principio pensamos en llevarlos a un albergue pero nos daba mucha pena que los sepaparan así que íbamos todos los días a llevarles comida y agua. Alguna vez aparecía la que creíamos era su madre quien comprobaba que sus pequeños estaban bien alimentados y volvía a marcharse hasta que, un buen día, desapareció por completo. Una semana más tarde, desaparecía también el más pequeñín y debilucho de todos. Sólo sobrevivieron Luna y Bimba. Luna era preciosa, gris clarito con unos grandes ojos verdes. Un día por la mañana aparecieron las dos en la puerta de casa pidiendo comida. Cuatro horas después, la descubrimos muerta al lado de nuestro coche. Fue un día muy triste. Yo no podía parar de llorar y Bimba sentía mucho su ausencia así que la llevamos al veterinario y tras un tratamiento para quitarle todos los parásitos que tenía en el estómago, hoy, la dulce Bimba es un miembro más de nuestra familia.
Invertimos la mitad de los ahorros que teníamos para la boda en comprar material, mobiliario y alquilar una pequeña oficina en el centro.
Y así cerramos el 2015, con nuestros respectivos proyectos en marcha y deseándole al 2016 que sea taaaan bueno como lo ha sido este. Para los que tenéis curiosidad por ver mi web, he de decir que aún no está del todo lista aunque lo estará muy pronto. Desde estas os invito a vivir una experiencia outdoor entre las playas y las montañas de Gran Canaria.
Graciasa ti que me lees ahora mismo, por estar ahí un año más, no imaginas lo feliz que me hace acompañarte durante los preparativos de tu boda a través de cada post que escribo. Te deseo un 2016 de alegrías, mucho amor y sueños cumplidos.