Siento decirles esto señores pero... nos hacemos mayores. Así como lo oyen. Y nos llega la edad en la que nosotros que habíamos sido espíritus libres, que el único gasto fijo que teníamos al mes era el de las cañas con los amigos, nos sorprendemos tirados en el sofá después de un duro día de trabajo haciendo números para comprarnos una casa. Hay que ver, ¡con lo que hemos sido!
Pero lo "peor" de todo es que estamos suuuuper ilusionados y a veces cometemos el error de no tener claro que es lo que a la hora de comprar realmente importa. Así que para echaros una mano estamos aquí.
¿En qué os tenéis que fijar si vais a comprar una casa para reformar?-En primer lugar saber la antigüedad de la finca, y es que esto va a ser decisorio en el estado del inmueble. Comprobad las ITES, si están todas pasadas. Si no es así puede suponer un desembolso grande de dinero a posteriori. Y enlazando con esto, que no os la den con queso con las derramas.
Si queréis reformar la casa a vuestro gusto y tirar por aquí y por allá, tened en cuenta el tipo de estructura. Pilares si, muros de carga no. Los muros de carga se pueden eliminar pero el coste de hacerlo es mucho mayor y las licencias que hay que solicitar también.
-Sabed que tipo de permisos y licencias vais a necesitar y cuánto va a suponer. Si lo que queréis hacer os lo van a permitir, por ejemplo cerrar una terraza.
Otra cosa importantísima, es el estado de las instalaciones y no solo las de tu futura casa sino también las del resto del edificio. Sabemos que esto es difícil de comprobar hasta que no se pica pero, preguntar a los vecinos es de sabios. No os quedéis con lo que os cuenta el propietario o en su defecto el chico de la inmobiliaria. Investigad cual Sherlock Holmes.
Una reforma suele incluir el cambio de todas las instalaciones de la casa si estas tienen más de 20 años. Tened claro qué os pertenece pagar a vosotros y qué a la comunidad.
-Todo se puede conseguir con dinero en una reforma pero la luz natural es como el tiempo, incomparable. La luz es uno de los principales factores que intervienen en nuestro bienestar. Es mejor tener unos cuantos metros menos y unos cuantos lúmenes más. Lo primero es solucionable con ingenio, lo segundo es mucho más difícil de arreglar.