Yo tomo agua para que mi cerebro trabaje mejor. Tomo agua para que las ideas puedan fluir. A veces me olvido, especialmente cuando estoy sumergida en alguna actividad frente al ordenador. El resultado suele ser dolor de cabeza, cansancio, y un bajón en mi productividad. Hasta ahora experimenté con diferentes tipos de recordatorio, que siguen siendo interrupciones.¿Y si lo puedo convertir en un juego?
Yo me hidrato porque quiero superar mi marca de ayer
Si bebes menos de un litro de líquido por día, sabes que deberías beber más. Conoces todas las razones objetivas por beber más agua. Pero seamos sinceras: la lógica es una pésima compañera cuando quieres cambiar un hábito. Necesitas incentivos, emoción, algún resultado más inmediato que la promesa que dentro de 15 años tendrás menos arrugas.
Cuando la tecnología trabaja para mi
Mi relación con la tecnología es complicada. Tuve una temporadas que quise tirar el móvil por la ventana, porque sentía que me iba la vida jugando Candy Crush y mirando el Facebook. Un día me hermano, exasperado, me preguntó: ¿Realmente crees que es culpa del móvil que tu no sabes usarlo?
Este día borré los juegos, desactivé todas las notificaciones y decidí dormir sin el móvil. Tomé la decisión consciente de quedarme tan solo con aquellas apps que me facilitan el día a día y que me ayudan a ser la mejor versión de mi misma. Mi Fitbit, la app de meditación y la app de mi botella Hidrate Spark 2.0 son algunas de las apps que se quedaron.
Conocer lo que te motiva es el primer paso para diseñar cualquier cambio! En mi caso son las metas diarias que me mueven - y lo pienso aprovechar.
PS: Si quieres saber más sobre la botella, visita www.hidratespark.com