Lo siento: soy ciclotímico

Por Conócete Y Quiérete


¿Tienes cambios de humor? ¿Tan pronto te sientes eufórico como abatido? ¿Te cuesta controlarte y explotas ante cualquier contrariedad?Si es así, es posible que seas ciclotímico.La ciclotimia o trastorno ciclotímico puede definirse como un trastorno del estado de ánimo que nos puede llevar de la depresión leve a la euforia, sin causa aparente. En realidad, puede decirse que es una forma leve de trastorno bipolar.El ciclotímico tiene la susceptibilidad a flor de piel, lo que revela una gran dificultad para tolerar la frustración, para afrontar los imprevistos.Se siente a gusto cuando está activo, cuando tiene muchas cosas de que ocuparse, cuando se siente productivo. En esos momentos puede atender a actividades diversas de forma incansable, restándole incluso horas al sueño. Pero de repente su nivel de energía baja, siente una gran tristeza y no se ve capaz de hacer nada, llegando a aislarse del resto de la gente.Quienes conviven con él no comprenden el por qué de estos cambios de humor. Él mismo tampoco lo entiende, simplemente convive con ello.¿Qué hacer?1º.- En el día a día, busca el desencadenante de esos cambios de humor.Un día cualquiera te encuentras bien y de repente ¿algo te tumba el ánimo? Párate a pensar, rebobina. Repasa qué cosas han pasado en esa franja de tiempo: qué has escuchado, qué has visto, qué sensaciones has tenido… Posiblemente darás con algo, con ese estímulo, a menudo casi imperceptible,  que ha desencadenado esa súbita bajada de energía evocando en tu memoria algún acontecimiento pasado, algún suceso que te pone triste pero que tratas de reprimir.2º.- Canaliza tus estados de humor, modula tu energía.Necesitas controlar, que no reprimir, tus emociones. Para ello son muy útiles disciplinas como el yoga o la meditación, que te ayudarán a tomar conciencia de tu fuerza interior y a reconciliar cuerpo y espíritu.3º.- Apóyate en tus amigos.Si te cuesta mantener las amistades precisamente por tus cambios de humor, hazles partícipes de tu problema pero demostrándoles que eres consciente del daño que causas a veces con tu comportamiento.