Para combatir estos molestos salpullidos puede utilizarse loción de calamina, un preparado exclusivamente para uso tópico (externo), normalmente compuesto por calamina, glicerina y agua (puede llevar más ingredientes), que se utiliza para aliviar la picazón, el dolor y la molestias debidas a estas irritaciones leves de la piel.
Pero eso no es todo, la loción de calamina posee propiedades astringentes suaves, antisépticas, protectoras, absorbente de humedad y secreciones, a la vez que actúa como suavizante de la piel.
Es refrescante y ayuda en la erupciones de la piel producidas por una mala digestión o una intoxicación leve alimentaria (por ejemplo: mejillones, leche o queso).
También puede utilizarse en el tratamiento de quemaduras (solares o no), eritemas, dermatitis, eczemas, prurito, picaduras de insectos (o medusas) y en general, en todo proceso donde se requiera astringencia y poder secante.
La calamina solamente se debe usar para uso externo. Nunca debe tragarse y no debe ser usada alrededor de los ojos o membranas mucosas (interior de la boca, nariz o genitales). Tampoco debe usarse si hay heridas en la piel.
Si se utiliza durante largos períodos de tiempo puede resecar la piel y producir irritación (por efecto rebote), por lo que es conveniente que consultéis con un profesional de la salud si vuestro problema no se soluciona a los pocos días.
La loción de calamina se vende con diversos nombres comerciales (Talquistina, Kalamina, etc..) en las farmacias y suprecio puede oscilar entre los cinco y diez euros. ¿ Y vosotros? ¿Habéis usado alguna vez la loción de calamina? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!!!