Look colegial:La tentación.
Publicado el 09 noviembre 2012 por Itxasomardones
@ItxasoMardones
"Cuando tengo que elegir entre dos tentaciones, siempre elijo la que no he probado antes"
(Mae West)
En el instituto, el mundo estaba dividido por una carretera. En una acera estábamos las del público, vestidas con vaqueros y zapatillas. En la otra acera, las del privado. Siempre con sus pendientes de perla y el uniforme: falda a cuadros, camisa y medias altas.
Ellas nos miraban con envidia porque teníamos la libertad de vestir como quisiéramos. Nosotras les envidiábamos porque ellas sí podían saltarse las reglas. Subían el bajo de la falda unos centímetros enrollándola sobre sí misma y así desafiaban el poder establecido.
Sin darme cuenta, estaba instaurando las bases de una ley no escrita que marcaría toda mi vida. El jardín del de al lado siempre parece más verde que el propio. Así que las que tenemos el pelo liso envidiamos a las rizadas y las afro arden de rabia al ver nuestro alisado japonés natural.
Las bajas queremos ser altas. Las rubias quieren ser morenas. Las pieles morenas quieren ser albinas. Si tienes las piernas largas, las quieres cortas. Si compraste el vestido morado, envidias el negro que lleva la de al lado. Así que decidí conjurar la regla no escrita convirtiéndome en una de ellas. Me puse el uniforme cuando ya ni tocaba.
Rescaté un antiguo jersey de rayas de Zara, un minipantalón a cuadros tan vintage que ni recuerdo dónde lo compré, un abrigo verde Verino y un bolso made in Harrods. Variás décadas después, me encontraba en la otra acera, la de los uniformes.
Y aunque a destiempo, descubrí que no tengo una acera predestinada, que puedo cruzar la carretera cuando me dé la gana y ser quien quiera ser. Que quebrantar la ley de la largura de la falda no tiene ninguna gracia cuando no hay quien las marque. Y que mi jardín era y es muy verde. Puede que no sea el más verde de todos, pero es el verde que he elegido.