Los beneficios de la Dieta Alcalinizante

Por Sofia Sofia Bionutrición @bionutrimad
Acumulamos con el tiempo altos niveles de toxinas en el organismo capaces de provocarnos las más diversas manifestaciones de que hemos llevado nuestro organismo al límite.Normalmente tras un largo período sin prestar demasiada atención a la dieta ni cuidarnos con suplementos detoxificantes notamos las típicas consecuencias de una alimentación que tiende más bien hacia el espectro ácido. Esto nos acaba pasando factura y encontrarnos con nuestro organismo en ese estado conlleva padecer síntomas tales como:
  • Fatiga
  • Falta de concentración, bajo nivel de memoria e intelectual
  • Dolores articulares y musculares
  • Dolores de espalda
  • Falta de energía vital
  • Desánimo, tristeza y estados depresivos
  • Somnolencia a deshoras
  • Baja resistencia física al ejercicio
  • Digestiones difíciles y pesadas
  • Trastornos intestinales (estreñimiento o diarreas)
  • Hinchazón abdominal y aumento de peso en general
  • Alergias en la piel y rinitis alérgicas
  • Candidiasis intestinal crónica
  • Falta de motivación e interés
  • Irritabilidad y mal humor
  • Sueño alterado (insomnio, dormir demasiadas horas)

Los alimentos que acidifican el organismo y lo pone en estos aprietos son:
  • Refinados: harinas, pastas, panes, galletas y bollos industriales
  • Embutidos industriales: de todo tipo (excepto el jamón serrano) incluidas las salchichas y los patés
  • Café: en exceso con azúcar y leche y el té
  • Alcohol: en exceso y refrescos azucarados
  • Alimentos industrializados: en sobre, congelados, pre-cocinados
  • Golosinas: de todo tipo, chocolate (cacao) y frutos secos (pistachos, anacardos y cacahuetes)
  • Carnes: sobre todo rojas si se comen periódicamente y todas las carnes en general (cerdo, pollo), mariscos y vísceras
  • Edulcorantes: aspartamo y sacarina
  • Mantequilla y margarina, leche y quesos curados y semicurados y huevos
  • Aceite de maíz
  • Salsas industriales: mayonesa, ketchup, mostaza, soja, y vinagre
  • Legumbres y cereales (tanto refinados como integrales)

Estos grupos de alimentos, aunque no todos son especialmente perjudiciales, sí son los encargados de acidificar el organismo, no obstante el equilibrio se produce cuando en nuestra dieta somos capaces de combinar la suficiente cantidad de alimentos acidificantes con los alcalinizantes logrando así un pH regular y más alcalino.El pH debe mantenerse en una franja que va desde de 0 a 14. Si nuestro pH es exactamente de 7 entonces está en perfecto equilibrio y es neutro o base, un pH por debajo de 7 representa acidez y por encima de 7 alcalinidad. Lo cual significa que el pH de nuestro organismo debería situarse en una franja media de 7 a 7,5 para estar en perfecta armonía y disfrutar de un estado de salud general excelente. 

Para llevar nuestro organismo al estado alcalino de pH, deberíamos consumir más de estos alimentos alcalinizantes:

Los alimentos que alcalinizan nuestro organismo proporcionando armonía y bienestar son:
  • Hortalizas de hojas verdes y todas las demás (excepto el tomate) y patatas
  • Castañas, almendras, uva pasas, dátiles
  • Aguas minerales y filtradas
  • Aguacate y aceitunas, aceite de oliva virgen
  • Azúcar integral, miel natural cruda y estevia
  • Frutas frescas (naranja, mandarina, plátano, cereza, piña, melocotón, mora, frambuesa, albaricoque, fresa, dátil, higo, kiwi, manzana, pera, limón, pomelo, sandía,  lima, uva, mango y papaya)
  • Semillas (lino, calabaza, girasol, sésamo)
  • Leche fresca biológica, yogur natural, huevos y mantequilla de buena calidad
  • Té de jengibre, té verde, de hierbas y agua caliente con limón natural
  • Tofu y soja, quinoa, arroz salvaje, mijo
  • Algas, brotes y legumbres
Una dieta altamente ácida predispone además a un mayor riesgo de padecer algún tipo de cáncer, algo que se reduce notablemente cuando llevamos una dieta más alcalina.Además evitaremos la osteoporosis, el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares o degenerativas. La dieta alcalinizante presenta una especial similitud con todo aquello que presenta un equilibrio entre dos puntos: pues consumir solamente alimentos de un tipo u otro también llevaría al desequilibrio y a tener problemas de salud. Se trata de moderarlos en nuestra dieta, pero hacia una tendencia más alcalina que ácida. 
Los beneficios de llevar una dieta más alcalina los encontramos en:
  • Un aumento notable de la vitalidad y la resistencia física
  • Estabilidad emocional y psicológica
  • Reducción del sobrepeso
  • Mejor funcionamiento de todos los órganos: riñones, páncreas, hígado, intestinos, etc.
  • Mayor claridad mental y mejor nivel de concentración y memoria
  • Menos dolores musculares y en articulaciones
  • Menor riesgo de desarrollar cáncer, enfermedades cardiovasculares o degenerativas
  • Más juventud y belleza
  • Piel más suave, más brillante (con menor tendencia a tener celulitis)
  • Remineralización del organismo y mayor aporte de vitaminas y nutrientes
  • Estado de ánimo constante y tranquilo, menor nivel de estrés
  • Mejor descanso nocturno
  • Mejores digestiones
  • Mayor confianza en uno mismo y un alto nivel de bienestar general
En general la dieta alcalinizante es beneficiosa para todos, hombres y mujeres de todas las edades y con cualquier trastorno de tipo de crónico que no encuentren soluciones en otros tipos de alimentación. 
Sofía Pencef