Si bien la lectura tiene muchos beneficios tengamos la edad que tengamos, a medida que nos hacemos mayores puede convertirse además en una herramienta muy útil. Así, además de ayudar a estimular la memoria, ofrece compañía y mantiene ocupada a la gente mayor.
Al leer hay que transformar los componentes lingüísticos, hacer relaciones, comprender las ideas en un contexto global y hacer trabajar la función de memoria para sostener la información.
En el caso de la tercera edad es recomendable leer por la mañana y con buena luz, buscando siempre libros con letra grande y no muy largos manteniendo la concentración. Es mejor leer un par de hojas al día por placer que no obligarse a leer 2 horas al día.
Un buenísimo ejemplo de los beneficios de la lectura en la tercera edad lo encontramos estos días en la prensa con el caso de Ana María Soledad López. Ana María es la lectora más veterana de la biblioteca de Lalín, y a sus 94 años se atreve con todo tipo de género atreviéndose incluso con la trilogía de Cincuenta Sombras de Grey . Sin duda Ana María es todo un ejemplo a seguir.
Sin duda la lectura es una forma de entretenimiento, fomenta la creatividad, ayuda a la fluidez verbal, potencia la atención y la concentración… son todo beneficios!