Los centros sanitarios andaluces comparten sus experiencias para reducir las resistencias a fármacos
Por Fat
Los centros sanitarios públicos de Andalucía pueden compartir sus experiencias exitosas en torno a las resistencias que los pacientes presentan a los fármacos, para así incrementar el nivel de efectividad de los tratamientos dispensados. Esta iniciativa forma parte de un proyecto más amplio que persigue dotar a los clínicos de nuevas herramientas con las que divulgar sus buenas prácticas en la atención integral al usuario. Un total de 726 centros del SSPA ya se han adherido a este proyecto, impulsado desde el Observatorio para la Seguridad del Paciente de la Consejería de Salud. En concreto, se trata de 544 centros de Atención Primaria, 158 de Atención Especializada, 23 equipos de emergencias y un centro de transfusión. A estos centros andaluces hay que añadir 16 centros de fuera de la comunidad autónoma, 2 de ellos argentinos. Todos ellos se han dado de alta en un sistema de trabajo en red ideado por el Observatorio para la Seguridad del Paciente junto a la Sociedad Andaluza de Farmacia Hospitalaria. Esta disposición permite que los centros que han alcanzado un nivel de cumplimiento más elevado en la materia actúen de mentores de otros centros que quieren mejorar en esta área. Así, se crea un espacio compartido de recomendaciones sobre el registro de los fármacos que se prescriben al paciente al ingreso y al alta hospitalaria para evitar duplicidades; el manejo de los tratamientos de alto riesgo para el paciente; garantizar la seguridad de la prescripción electrónica; evitar confusiones entre los medicamentos que presentan un nombre o un envase similares; la adquisición de listados de verificación quirúrgica; evitar las infecciones bacterianas según el proyecto BacteriemiaZero y el control de las infecciones nosocomiales. Además, Salud participa en el Sistema Europeo de Vigilancia de Resistencias a Antibióticos (EARSS), creado en 1998 y compuesto por más de 1.000 laboratorios de 31 países europeos. Por otro lado, realiza un seguimiento de los microorganismos multirresistentes según el Plan de vigilancia y control de las infecciones nosocomiales, integrado en el Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Andalucía. Así, desde 2002 los hospitales públicos disponen de este protocolo de actuación que fomenta el estudio de las cepas resistentes a los fármacos disponibles. Estos trabajos permitieron en 2008 poner en marcha tres laboratorios de referencia para uno de los microorganismos multiressitente, el mycobacterium tuberculosis, además de establecer la obligatoriedad del estudio de la sensibilidad a los diferentes antimicrobianos para la tuberulosis Igualmente, la Estrategia de Seguridad del Paciente promueve otras medidas sencillas pero de enorme impacto para la población y los profesionales sanitarios como la correcta higiene de manos, que constituye un elemento fundamental para brindar una atención sanitaria segura y proteger a los pacientes de los efectos negativos de las infecciones evitables. En este sentido, la Agencia de Calidad Sanitaria ya ha otorgado el distintivo 'Manos seguras' a 90 centros que cumplen con las recomendaciones clave para la higiene de las manos, una iniciativa impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, otros 101 centros se encuentran en proceso de evaluación para lograrlo. En esta línea de trabajo también se encuentra el grupo de `Uso seguro del medicamento´ de la Consejería de Salud y un proyecto del Servicio Andaluz de Salud denominado `Prevención de resistencias y uso adecuado de antimicrobianos en los centros del SSPA´ y financiado por el Ministerio de Sanidad. Asimismo, la edición de 2010 de los Premios Salud Investiga reconoció el trabajo de Jesús Rodríguez Baño, presidente de la Sociedad Andaluza de Enfermedades Infecciosas y jefe de sección de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del hospital Virgen Macarena de Sevilla, por los resultados obtenidos en la prevención y control de infecciones nosocomiales y las resistencias a antimicrobianos. --Día Mundial de la Salud Mañana jueves se celebra el Día Mundial de la Salud, que este año se dedica a las resistencias que los pacientes presentan a los fármacos, una de las estrategias de seguridad del paciente y, por tanto, componente clave de la calidad asistencial. Así, este programa ha adquirido una gran relevancia, tanto para los pacientes y sus familias, ya que pueden convertirse en agentes activos para garantizar o potenciar su seguridad en el ámbito sanitario, como para los gestores y profesionales que desean ofrecer una asistencia sanitaria efectiva y eficiente. En esta área, los andaluces también pueden participar y formar parte de la Red Ciudadana de Formadores en Seguridad del Paciente, que fomenta el uso adecuado de medicamentos a través de los cursos de formación que imparte para la ciudadanía en diferentes comunidades autónomas. Esta iniciativa, pionera en Europa, está impulsada por la Agencia de Calidad del Sistema Nacional de Salud y gestionada por la Escuela Andaluza de Salud Pública. Uno de los módulos que integran el programa formativo de este proyecto está dedicado al uso seguro de medicamentos y contempla actividades formativas sobre la composición de los medicamentos y los elementos que pueden afectar a la seguridad, sobre su adecuada administración, así como recomendaciones sobre el almacenamiento, conservación y caducidad de los mismos. Otro de los aspectos que se tratan en el curso es cómo identificar en Internet información clave sobre los fármacos. Además, durante este año se ha incluido información y prácticas para entrenar algunas habilidades que favorezcan la comunicación entre los pacientes y los profesionales de la salud y farmacéuticos, contribuyendo así a una mayor seguridad Este proyecto se desarrolla a través de la formación de un grupo de 25 ciudadanos en este ámbito, que se encarga de impartir éste y otros módulos con el apoyo metodológico de la Escuela Andaluza de Salud Pública. Hasta ahora, los cursos se han realizado en Galicia, Cataluña, Aragón, Castilla La Mancha, Madrid y Andalucía. Está prevista una nueva sesión entre el 12 y el 13 de abril para que estos usuarios adquieran conocimientos de buenas prácticas en la seguridad de los pacientes. --Uso racional de antibióticos Los antibióticos son un grupo de medicamentos que se utilizan en el tratamiento de infecciones. Estos fármacos sólo curan enfermedades producidas por bacterias, por lo que son ineficaces para otro tipo de gérmenes como los virus. Sin embargo, un alto porcentaje del consumo de antibióticos se destina a tratar infecciones respiratorias, cuando la mayoría no necesita este tipo de medicamentos porque son procesos virales. De hecho, un uso inadecuado de los antibióticos, bien contra organismos para los que no están indicados, o bien por un uso reiterado provoca que los organismos se vuelvan multirresistentes a ese tratamiento que queda sin efecto en posteriores usos. Por ello, el Ministerio de Sanidad y Política Social ha dirigido varias campañas orientadas al consumo racional de antibióticos, refrendadas por la Consejería de Salud. Estas iniciativas van orientadas a sensibilizar a la población sobre los riesgos de la automedicación, así como el aumento de la resistencia a estos fármacos que ocasiona un mal uso.