Aunque son mamíferos y no tienen nada que ver con los pájaros, los murciélagos vuelan, baten las alas de forma parecida a como lo hacen las aves. Son silenciosos y se mueven rápidamente. No caminan, pero pueden llegar a trepar gracias a sus garras.
Los murciélagos a veces se mueven por tierra con las alas plegadas, impulsándose con las patas y ayudándose con las uñas del dedo pulgar, pero sus movimientos son torpes y lentos.
Observamos dos tipos de murciélagos. Los de alas largas y estrechas, que vuelan rápidos y alto, pueden recorrer largas distancias y no descansar; sin embargo, los murciélagos que tienen las alas cortas y anchas son más lentos y vuelan a poca altura, aunque se mueven muy bien.
Las alas de los murciélagos están sujetas a sus patas anteriores, son extensiones de piel, como las varillas de los paraguas. La longitud y la anchura del ala del murciélago depende del tamaño de los dedos. Comparando unos y otros murciélagos, los de ala estrecha tienen el segundo y tercer dedo más largo y el quinto dedo más corto.
Son capaces de volar y lo hacen siempre buscando evitar la competencia. Los hay que cazan insectos en árboles y arbustos, mientras otros cazan a cielo abierto. Pasan el día en las cuevas húmedas, salvo las hembras en épocas de gestación, que se alejan del macho y buscan refugios cálidos. Durante los meses de invierno duermen hasta la primavera.
Los murciélagos utilizan para orientarse la ecolocalización, un invento qde la naturaleza que también usan otros animales, parecido a un radar, mediante el cual emiten ultrasonidos por su boca o por su nariz; estos sonidos rebotan en los objetos, vuelven al animal y le dan información sobre distancias, tamaños,...