Los niños en edad preescolar son los que más atraídos se sienten por la comida basura, la tele y los videojuegos, sin embargo en la época de verano son más activos físicamente y pasan más tiempo jugando al aire libre, según una encuesta realizada por el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO).
La mayor parte de los niños que han participado en la encuesta son de edad preescolar y tienen entre 4 y 6 años. De este grupo, compuesto por 30 menores, 16 son chicas y 14 chicos. El resto de los niños, 25 en total, tienen entre 7 y 11 años de edad, predominando levemente las chicas (15) ante los chicos (10).
Los menores pasan una media de 2 horas y 13 minutos al día frente el ordenador, viendo televisión o jugando con la videoconsola, además la encuesta muestra que son los más pequeños, de entre 4 y 6 años de edad, los que más atraídos se sienten por estas actividades. Además, una tercera parte pasa hasta 5 horas a diario ante la pantalla.
Un dato esperanzador es que en época de verano, cuando no van a la escuela, los menores son más activos físicamente y dedican más tiempo a jugar con sus amigos en la calle, hacer deportes o actividades en grupo, siendo una media de 2 horas y 46 minutos al día.
Según la encuesta, la toma diaria de frutas y verduras de los niños ronda entre 2 y 3 raciones. Los que más se acercan al número ideal de 5 piezas al día, recomendado por nutricionistas, tienen entre 7 y 11 años de edad y una base de cultura nutricional.
Lo que respecta las comidas poco saludables como la bollería industrial, golosinas, pizza, hamburguesa, chips, chocolate y refrescos, los niños reconocen tenerlas a su alcance y consumirlas entre una y dos veces al día.
Los que más pecan en este sentido, son de nuevo los más pequeños, en edad preescolar que sienten un especial atractivo hacia este tipo de comida. "El consumo de estos alimentos debe limitarse a dos veces por semana, siendo tolerados de forma ocasional y no utilizados como premio de buena conducta", advierten.
Desde IMEO recuerdan a los padres que deberían de tener especial cuidado con este tipo de actividades que puedan resultar adictivas y conducir en un futuro a obesidad. "Por esta razón, la tele, el ordenador y los videojuegos ocupan el ápice de la pirámide de actividades que un niño podría practicar sólo de forma ocasional, sin superar las dos horas semanales", resume Rubén Bravo, especialista en nutrición infantil.
Asimismo, insiste en que "los padres tendrían que implicar más a sus hijos en actividades tan sencillas, como ayudar en casa, hacer la compra, sacar el perro, utilizar las escaleras en vez del ascensor, organizar excursiones en bici o paseos en el parque". A su juicio, se trata de unas edades "clave" en la educación de los hijos, ya que es "cuando se crean los saludables hábitos".
La encuesta se realizó durante un encuentro, que reunió especialistas del centro, educadores y monitores deportivos se celebró durante la semana pasada en el campamento urbano Trotacosmos II, organizado por la asociación ABE Cirilo y Metodio y subvencionado por la Consejería de Empleo, Mujer e Inmigración de la Comunidad de Madrid.