Los últimos momentos quedan impresos en el cerebro después de morir

Por Alexiustoday

¿Alguna vez han notado que al cerrar los ojos les queda una imagen grabada en la retina? Pues bien, resulta que nuestros cerebros pueden hacer lo mismo después de morir.

Científicos han desarrollado una técnica que puede recrear un mapa 3D de las células que se estaban disparando en el cerebro de un ratón un par de horas antes de que muriera, dándoles una imagen de alta resolución de lo que estaba pasando en la cabeza del ratón estando en vida; en este caso, cuando de cuando el ratón se encontró con un miembro del sexo opuesto. El equipo de investigadores publicó sus resultados recientemente en la revista Cell Reports.

"El trabajo de cartografía de estos circuitos en todo el cerebro del ratón es bastante heroico", señaló Rafael Yuste, profesor de ciencias biológicas y neurociencia en la Universidad de Columbia y líder del Brain Activity Map Project que inspiró la iniciativa BRAIN de Obama. Advierte que se trata de una técnica no tan ideal ya que el ratón debe ser sacrificado en el proceso si es que no se quedan quietos el tiempo suficiente para una resonancia magnética no invasiva. De hecho, por esta razón es que se pudo observar el “registro” de dicha actividad cerebral después de muerto el ratón.

"Podemos tomar a ratones normales y que te hagan tareas complejas, como de conducta social, y luego mirar a lo largo de todo su cerebro e identificar las regiones del cerebro que se activaron", dijo Pavel Osten, profesor en Cold Spring Harbor Laboratory e investigador en el estudio.

En el estudio se utilizaron ratones modificados para que sus neuronas se iluminen de color verde cuando se disparan, encontrando que, incluso antes que los comportamientos de apareamiento o de agresión, las regiones del cerebro asociadas con el comportamiento reproductivo, el comportamiento sexual y hasta la agresión se iluminaron cuando un ratón macho se encontró con una hembra de ratón. Otro hecho interesante hallado en el estudio es que cuando el ratón macho se encontró con otro ratón macho, las regiones del cerebro que controlan el comportamiento defensivo brillaron. 

La nueva metodología de Osten, que mejora una que publicó originalmente en 2012, automatiza varias técnicas de laboratorio diferentes antiguamente hechas a mano, que en este estudio permitieron a los investigadores crear un mapa de activación cerebral desde los primeros momentos de la detección de otro animal. Se tiene la esperanza de que con el tiempo se será capaz de arrojar luz sobre cómo las enfermedades y fármacos cambian conexiones en el cerebro. Hasta ahora, dijo Osten “Esa comparación en animales no ha sido realmente posible en absoluto en este tipo de escala”.

Yuste escribió que la detección de marcadores fluorescentes de la actividad cerebral después de la muerte representa “un paso hacia técnicas futuras para el mapeo en toda regla de la actividad neuronal en el cerebro vivo en tiempo real”.