Sabemos que la televisión todo lo absorbe y todo lo integra, poniendo cualquier ingrediente que se le facilite a hervir de inmediato en esa olla que los especialistas anglosajones llamaban antes "la producción de cultura de masas", y ahora ya sin rebozo alguno "las industrias del entretenimiento". Con todo hay casos que dan qué pensar, por lo raros que son y por la capacidad que en ellos demuestra el monstruo que ocupa nuestros salones para digerir lo que le echen. Les pondré un ejemplo, claro como este día de casi primavera en Barcelona.
La primera vez que oí en CSI New York que habían comenzado a usar "Baba O'Riley" como nueva sintonía de cabecera (los primeros episodios de la serie tenían otra), me quedé turulato y pensé que los productores de la serie se habían vuelto todos locos. ¡No era posible! Bien es cierto que el mítico tema de Who queda reducido en esa sintonía a un acelerado corte en el que apenas se oye a Roger Daltrey berrear eso de ¡¡¡Out here in the fieeeeeeelds I farm for my meaaaaaaals !!! ¿Qué diablos tiene que ver ese arranque con Nueva York? Aparentemente, nada. Pero sobre todo, ¿cómo es posible que la historia que cuenta la letra de "Baba O'Riley" identifique musicalmente una de las series-estrella entre las fabricadas tras el 11-M a instancias del poder neoconservador, precisamente para justificar el control policial sobre la sociedad estadounidense? ¡Y encima tomando Nueva York como escenario y campo de batalla contra el Mal! ¿Le pedirían permiso a Who? (cuyos componentes por lo demás, han tenido algo más que problemas a lo largo de décadas con las policías de EEUU y Gran Bretaña por asuntos de consumo de drogas). Todo en este asunto es raro, raro.
Porque resulta que la letra de
"Baba O'Riley" alude ni más ni menos que a un pequeño traficante de drogas callejero neoyorkino, un tipo tan orgulloso de su oficio y estilo de vida como para gritar a pleno pulmón, más o menos: "no necesito luchar para probar que estoy en lo cierto, y no necesito ser disculpado". Patidifuso se quedaría el superpoli fascistoide que encarna Gary Sinise en la serie aludida si le presentaran al verdadero Baba O'Riley, un personaje real, de carne y hueso, quien de todas maneras y vista su manera de vivir, lo más probable es que a estas alturas lleve unos cuantos años criando malvas, habida cuenta de que la canción de Who es del año 1971. O quizá Baba O'Riley de seguir vivo, sea hoy un respetable hombre de negocios, abuelo con muchos nietos y simpatizante del Tea Party.Ah sí, seguro que alguien les contará que O'Riley era un santón hindú por el que la tropa de Pete Townshend sentía gran devoción. No le crean. A los Who, eso del "flower power" y las bobaliconerías orientalizantes tipo Beatles les traían al fresco. Seguro que si en esos años setenta debieron elegir en alguna ocasión entre la mercancía que expedían los gurús hindúes y la que ofrecía el traficante de la canción, no tuvieron dudas. Gary Sinise, el hiperpoli McTaylor, tampoco las habría tenido: ¡A Alcatraz con ellos!.Les dejo un enlace al tema de Who, Que lo disfruten.