El fin de semana antes de irme unos días de vacaciones a casa de mis padres en Murcia, hice estas madeleines de almendra, pero haciendo unas pequeñas adaptaciones para utilizar los ingredientes con los que suelo cocinar en casa.
Esta receta se la dedico a mi sobrino y ahijado Ignacio que hoy es su Santo.
50 gr. de aceite de coco (o aceite de oliva suave)
2 cucharadas soperas de Stevia
50 gr de salvado de avena
1/2 cucharadita de levadura química
esencia de vainilla al gusto
Batir ligeramente los huevos en un cuenco. Añadir el edulcorante, la vainilla y la sal y batir hasta que quede esponjoso. Incorporar el salvado, la almendra molida y la levadura química, y batir un poco más.
Agregar por último el aceite y mezclar hasta conseguir una masa homogénea. Tapar con film y dejar reposar en la nevera como mínimo 30 minutos. Precalentar el horno a 180ºC y engrasar una bandeja con moldes de madeleines, si son de silicona no hará falta.
Repartir la masa llenando casi hasta arriba los huecos. Hornear durante unos 8-10 minutos, o hasta que se hayan dorado por encima y al pincharlas con un palillo este salga limpio. Esperar un par de minutos,desmoldar y dejar enfriar completamente sobre una rejilla. Y listas para degustar.
NOTA: Para la primera y segunda fase de la dieta Dukan cambiar la harina de almendra por más salvado y el aceite se puede sustituir por queso 0% o yogur y añadir aroma de almendras.