En mi casa siempre hay manzanas, cuando están lozanas nos gusta comerlas a mordiscos, pero llega un momento en que empiezan a arrugarse y es cuando hago todas esas recetas con ellas (aquí) , aquí las podéis ver: dulces, saladas, fáciles o más elaboradas, pero todas con manzana.
En ocasiones tenemos piezas en que tienen una parte negruzca, el resto es aprovechable pero no sabemos que hacer con ellas aparte de compota . Os propongo hacer esta postre, veréis como que de unas manzanas feas pero buenas, se puede obtener un plato digo, riquísimo y por que no, de fiesta.
Ingredientes para 4 personas: 4-6 manzanas 4 c/s de azúcar moreno zumo de limón 25 gr. de mantequilla 100cc. de moscatel helado de nata
Pelar, descorazonar las manzanas, partirlas en cuartos y rociarlas con un poco de zumo de limón para que no se oxiden.
Colocar en una bandeja de horno las manzanas con la parte redondeada hacia arriba, repartir un poco de mantequilla, espolvorear con azúcar moreno, regar con el moscatel e introducir en el horno precalentado a 180º durante unos 20 minutos.
Las manzanas tiene que quedar tiernas pero a la vez enteras, sin deshacerse.
Colocar los gajos de manzana en el plato de servir junto con un poco de helado de nata.
NOTA: La cantidad de manzanas depende de su tamaño o de lo “sanas” que estén. ** La cantidad de mantequilla es orientativa. ** Poner el vino dulce que tengáis en casa: Oloroso, oporto, ratafía, .. ** Helado de nata, de vainilla, ... de lo que más os guste.
Celíacos: aseguraros bien de que todos los ingredientes sean sin gluten.