Este último lunes del año os traigo un apartamento de 83 m² que no porque sea de segunda mano tiene nada que envidiar a muchos de nueva construcción.
Bonitos elementos originales del año de construcción, 1929, como los altos techos y ventanales o la despensa, se mezclan con otros más modernos añadidos en posteriores renovaciones, como el suelo de madera de roble, las puertas dobles correderas y un bonito mobiliario en colores armónicos, que a su vez combina piezas modernas y vintage.
Puro estilo nórdico bañado por esa luz escandinava que todo lo hace más acogedor. ¡Feliz lunes!
Vía: Bolaget