Más del 50% de los costes de la Artritis Reumatoide se producen fuera del sector sanitario

Por Fat
Más de 2 millones de personas padecen Artritis Reumatoide (AR) en Europa, una enfermedad altamente discapacitante y dolorosa que deteriora la calidad de vida de quienes la padecen y que además lleva asociada una importante carga económica y social. El desarrollo de nuevos y mejores fármacos para el tratamiento de la AR ha supuesto una esperanza para los pacientes europeos, pero éstos todavía se enfrentan a grandes desigualdades para acceder a ellos motivadas por el lugar donde residen.
Así, el porcentaje de pacientes que han accedido a tratamientos biológicos varía de forma significativa desde el 30% en Noruega al 1% en Bulgaria. En España, el 17% de las personas con Artritis Reumatoide son tratadas con estos fármacos, cifra que supera la media europea, pero que se sitúa por debajo de países como Bélgica (20,5%), Irlanda (20%) o Dinamarca (18%).
Estas son algunas de las conclusiones del informe ‘Acceso a Terapias Biológicas en Artritis Reumatoide en Europa’, realizado por Gisela Kobelt para la Federación Europea de Asociaciones de la Industria Farmacéutica (EFPIA) en 31 países de Europa y del ‘Estudio sobre barreras de acceso a los tratamientos para Artritis Reumatoide’ realizada en Francia, Alemania, Italia, España y Reino Unido. Los estudios tienen como objetivo presentar nuevos datos sobre el uso de fármacos biológicos para la AR en el entorno europeo y evaluar los factores que influyen en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de la enfermedad. El segundo de ellos valora también las desviaciones respecto a las recomendaciones realizadas por la Liga Europea contra las Enfermedades Reumáticas (EULAR).
"La Artritis Reumatoide es la enfermedad inflamatoria articular más común", explica Antonio Torralba, presidente de la Coordinadora Nacional de Artritis (ConArtritis). "Su carácter crónico y el alto riesgo de producir discapacidad e incapacidad la convierten en la enfermedad con mayor impacto en la calidad de vida de los pacientes que la sufren. Según el estudio de la EFPIA se empieza a demostrar que existen beneficios potenciales en un acceso amplio y temprano a los tratamientos biológicos, ya que se evitan bajas por incapacidad y convierten a la Artritis Reumatoide en una de las causas de incapacidad prevenible más frecuente".
--El impacto económico de la Artritis Reumatoide
El coste anual de la AR en España es de 9.944€ por paciente, menor que en países de nuestro entorno como Islandia (21.135€), Noruega (20.700€), Francia (20.522€) o Alemania (18.791€) y por debajo de la media europea (13.000€). Más de un 50% de esa cifra se corresponde con costes ajenos al sector sanitario, tales como la pérdida de productividad o el coste de los cuidadores profesionales.
En Europa Occidental, sólo el 9% del coste de la AR se relaciona con el uso de fármacos biológicos. En general, aquellos países que registran un uso elevado de biológicos consideran que no sólo son muy efectivos sino que su precio se ve compensado por diferentes razones: ahorro de costes sociales, aumenta la capacidad del paciente para seguir activo en el mundo laboral y existe un incremento de la calidad de vida de los pacientes, etc.
--¿Cómo varía el diagnóstico y tratamiento de la Artritis Reumatoide en Europa?
El informe sobre barreras de acceso, toma como referencia las guías de EULAR y valora las desviaciones respecto a estas guías en cuanto a diagnóstico, tratamiento y monitorización. Cada uno de los 5 países evaluados se desvía en mayor o menor medida respecto a las recomendaciones tomadas como estándar de EULAR. Se pueden ver desviaciones importantes en cuanto a los tiempos de diagnóstico (las guías recomiendan iniciar el tratamiento en los seis primeros meses desde el inicio de los síntomas) y la variabilidad en los métodos de diagnóstico (pruebas de laboratorio y técnicas de imagen para la valoración de los parámetros de actividad de la enfermedad).
"En el caso de España, el retraso en el diagnóstico puede ser consecuencia de varios factores. Una de las causas quizás sea que los médicos de Atención Primaria no derivan a los pacientes a los reumatólogos en el tiempo deseable. Además, en algunos hospitales había listas de espera en Reumatología, factor que está cambiando gracias a la creación de Unidades de Diagnóstico de Artritis Precoz. Por último, el desconocimiento de los pacientes provoca en muchas ocasiones que no reconozcan los síntomas de la Artritis Reumatoide y tarden en acudir al médico", asegura el Dr. José María Álvaro-Gracia, del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario La Princesa de Madrid.