Título original: Maskerade
Autor: Terry Pratchett
Editorial: DeBolsillo
Año publicación: 1995
Género: Fantasía. Humor. Aventuras
Sinopsis: En esta nueva entrega de la serie Mundodisco, la disparatada y mordaz saga de Terry Pratchett, reaparecen algunos viejos personajes de la subserie de las brujas que protagonizarán una hilarante parodia de El fantasma de la Ópera. Yaya Ceravieja y Tata Ogg están aburridas, desean entrar en acción, pero necesitan una nueva compañera. Para ello se desplazarán a la Ópera de Ankh-Morpor, dirigida por un incompetente y habitada por un fantasma sanguinario
Opinión personal: La reseña de este libro viene atrasada, y la razón es que apenas lo terminé corrí a buscar el siguiente. El cual también terminé y me dejó con tremenda resaca literaria.
La historia se divide entre el viaje y las travesuras de ambas brujas, y la historia del Teatro de la ópera, con el fantasma y la nueva bruja que espera escapar a ese destino. Hablo de Agnes Nitt, (de nombre artístico Perdita, a tal punto que su seudónimo ha cobrado personalidad propia y le habla desde su cabeza por momentos).
Por otro lado, la temática de fondo fue de mis favoritas: la superficialidad, las máscaras que usamos todos y la facilidad con que juzgamos a los demás por sus apariencias y condenamos sin preguntar dos veces. La doble ironía de que el Fantasma solo se enamore de la chica hermosa es lo más divertido. También hay continuas referencias al detrás de escena de las compañías que realizan este tipo de espectáculos y a obras famosas con nombres ligeramente cambiados. He reído como loca, me he encariñado con el personaje de Agnes/Perdita y he extrañado a Magrat también. Como en ocasiones anteriores, la aparición de la Muerte se lleva algunos de los mejores momentos. Por ejemplo, la escena en que espera el último canto de un cisne antes de llevárselo al otro mundo y éste no quiere darle con el gusto. Y el dueño del Teatro de la Ópera, el Señor Balde, es muy gracioso con sus razonamientos de inversor que no ve un centavo de ganancia.
En conclusión, este es otro gran acierto del autor, aunque se echa de menos la dinámica de las tres brujas originales. Y me dejó con ganas de terminar de leer el original, que lo dejé empezado en mi biblioteca.
Calificación:
Apto para: Lectores de la saga Mundodisco o de la Serie de las Brujas al menos. No apto para: Asesinos que usen una máscara para sacarse de encima a los entrometidos del Teatro de la Ópera. Dulzura: Agnes es pura dulzura. Y Walter Plinge.Acción: Bastante, gracias a Tata, Yaya y a Greebo. Sangre: No, los métodos de asesinato no incluyen presencia de sangre.Sexo: Alguna que otra broma sobre el asunto. Nada más.(Aviso: No pongo más puntaje en números. Si lo terminé de leer es porque lo disfruté. Los que no termine irán en otra sección.)