Pobladores y pescadores de diversos lugares, se quejaron ante la prensa por lo que consideran un atropello de parte del Club Terrazas de Miraflores, cuyos directivos habrían mandado colocar dos tranqueras que impiden el libre tránsito por un paso de servidumbre (vía de uso público), que lleva hacia las zonas de pesca artesanal en el sector y a la playa Chepeconde.
Así, se desprende del segundo intento del señor Walter Rivera quien quiso ingresar a disfrutar con su familia en la referida playa, y no pudo hacerlo, dado que el Administrador del lugar Ramos Tejada, le indicó que “tenía órdenes precisas de no dejar ingresar a nadie al lugar, porque ésta era una playa privada”.
El sexagenario hombre, se dirigió entonces a la Municipalidad a quejarse y de igual modo, por ante la Comisaría del distrito de Cerro Azul, en donde fue atendido y en compañía de funcionarios de dicha corporación edilicia y de miembros del orden, se dirigió nuevamente hacia Chepeconde, por tercera vez, en donde –curiosamente, esta vez- no había nadie, ni vigilantes ni administrador. Cerca de 40 minutos permanecieron en el sito y fue ahí que en virtud de ello y conforme a las normas, los integrantes del municipio local, procedieron a levantar un acta pertinente, teniendo ya como premisa, la Resolución Nº 130-2018-JDPUOPC/MDCA que señala expresamente en su artículo primero: “… de conformidad con la ley 26856 y el D.S. 050-2006-EFE, las playas son bienes de uso público, inalienable e imprescriptible, estableciéndose la zona de dominio restringido, se aprueba determinar la zona de acceso público a la playa en el Km. 120.8 de la Panamericana Sur.”.
Como se pudo dar a conocer, ésta resolución señala además en su artículo cuarto que “el desarrollo de su proyecto de habilitación urbana, deberá de permitir el tránsito vehicular en doble sentido; así como el desplazamiento peatonal de conformidad con el D.S. Nº 050-2006-EF”.
Entrevistada sobre el particular, la alcaldesa de Cerro Azul Terencia Córdova de Salazar, indicó que «este problema viene de muchos años atrás, por el irrespeto que hay sobre muchas normas y leyes, pero que por ello su municipio, viene notificando y viendo muchos casos y muy a pesar de ello, existe ese comportamiento de algunas personas, pues más del problema del Club Terrazas de Miraflores (………….…) porque cada mil metros debe de haber el ingreso, pues las playas son espacios públicos”. Señaló.
Por otro lado, el Señor Alberto Barraza Vásquez, actual Presidente de la Asociación de pescadores Independientes Cordeleros Artesanales de Cerro Azul (ASPICA), señaló que a pesar de la Ley de Playas y lo establecido en la Constitución Política del Perú, muchos de los integrantes de sus gremios, se han visto perjudicados con el accionar de los clubes que se encuentran a orillas del litoral, dado que no les permiten ingresar a realizar sus faenas diarias, incluso han sido amenazados con armas de fuego.
A la altura del kilómetro 120 de la carretera
Panamericana Sur, se encuentra el ingreso hacia la Playa Chepeconde, un lugar que hace algunos años atrás, recibía a pescadores y gente que en el verano solía llegar a contemplar y/o disfrutar del mar cerroazuleño, hecho que ahora resulta “negado” para cualquier peruano que en uso de su derecho al libre tránsito, que es un elemento conformante de la libertad y una condición indispensable para el desarrollo de la persona y de la facultad de desplazamiento que se colige en cada tramo del territorio nacional, también se manifiesta a través del uso de las vías de naturaleza pública o de las vías privadas de uso público.
«Ius movendi et ambulandi»
Esta es una figura jurídica aplicada en casos similares, en que se han pronunciado destacados juristas, que han sabido “quitar la paja del trigo”, para llegar a la conclusión que se expresa en la libertad de tránsito de los ciudadanos peruanos por parques, calles, avenidas, carreteras, y se manifiesta, también, en el uso de las servidumbres de paso, como es el caso del acceso –reiteramos- cerrado por un abusivo club privado que cree que es dueño de una de las partes de las playas del sur.(Percy Castañeda Arellano)