Maurizio Cattelan, italiano, nacido en 1960. Si preguntas a los grandes entendidos del arte, la mayoría le situaría entre los más importantes del panorama actual. Ha expuesto en el MoMa, es invitado seguro en la Bienal de Venecia, tiene obras en el Guggenheim de Nueva York, en la colección Jumex, el museo de arte contemporáneo de Seattle, y tantas y tantas más.
Se trata de un escultor hiperrealista que juega con el humor y la crítica, con la ironía, con imágenes a veces absurdas, con el humor negro. Su obra más polémica fue la llamada "La nona ora" en la que representa al Papa Juan Pablo II derribado por un meteorito. Tampoco pasó desapercibida la representeación de Hitler, a tamaño algo más pequeño del real, arrodillado y rezando como alusión al miedo. En ocasiones utiliza la representación de animales con actitudes humanas, figuras que aparecen en el techo, que brotan de una pared o que se asoman desde un boquete del suelo. Muchos hablan de él como el mejor relevo de Duchamp.
Es un artista autodidacta. Recibe influencia de unos años en los que trabajó en un depósito de cadáveres y fabricando muebles de madera. Ha sido también autor de diferentes performances (fijó a un galerista con cinta a una pared), y creó una revista titulada "Permanent Food".
Actualmente vive en Nueva York y trabaja como comisario.
A Manu por descubrímelo...