1 -Sientate cómodamente visualiza la belleza de la naturaleza: bosques, lagos, el mar, rios, ... elije el que mas te guste, el que mas te llena de paz, el que mas te llene de bienestar, ... en estos momentos ya se encuentra frente a ti. Inspire esa belleza y siente como esta energía de belleza llega a tu corazón. Desenfoca la vista y comenzarás a ver la luminosidad que irradia la naturaleza que se encuentran ahi. Inspira profundamente y siente como esa energía con cada inspiración llena tu corazón y comienzas a sentir una sensación de amor que te eleva.
Desde tu interior generas una luz de amor que sale de tu corazon, pasando por tu cabeza y se conecta con tú naturaleza y la sensación de amor sigue creciendo. (tómese su tiempo en esta práctica)
2- Pleno de energía de Amor cierras tus ojos e imaginas el cielo estrellado a tu alrededor, imagina que todas las estrellas se conectan contigo, sintiendo como su luz incrementa en cada inspiración su expansión áurica. Inspira profundamente y siente como el Amor en tu interior crece.
Siente como esa energía sale de ti a través de todos tus poros e ilumina tu cuerpo energético, va hacia el Cosmos y regresa a ti llenándote de más Amor.
Tu ser está conectado con el universo, pleno de energía.(permanezca en este estado por unos segundos)
3- Visualiza sobre tu cabeza la imagen de tu Angel de la Guarda. Imagina que la luz que sale desde el centro del corazón del Ángel es como un vapor luminoso blanco y dorado, que se puede sentir fresco y cálido a la vez, mientras te imaginas que está parado en una estrella de cinco puntas. Inspire y siente como esta luz cubre tu cabeza y tu rostro. Ahora comenzarás a sentir un cosquilleo en tu coronilla, un tibio calor que te envuelve... Inspire aún más profundamente y siente que esa luz llega a tu corazón. Siente la paz y la alegría plena, propia del estado de Gracia del Reino Angélico. Cuando sientas esto pide a tu Ángel que te dé una muestra de su Amor generando una coincidencia favorable para ti o haz un pedido simple para sentir su acción en tu vida.
4- Lleva tus manos hacia tu corazón en señal de agradecimiento a Dios y a tu Ángel. Conserva lo más posible el estado de felicidad que está en ti en espera de la señal que le pediste a tu Ángel. Si en este momento, sientes la presencia de tu Ángel y su acción en tu vida, te encuentras preparado para profundizar aún más esta relación y transformarte en un canal de la Luz del Reino Angélico en nuestra Tierra que te permitirán alcanzar una forma más plena de vivir y profundizar más esa relación con tu amigo inseparable: Tu Ángel Guardián