Merengue crujiente

Por Carmenrosa @MicocinaCR

Cuando salieron del horno, nada más verlas me salió espontáneamente la frase ¡¡ merengue, merengue.....!!

Una de las frases que ha hecho famosa el vecino más “cuqui” de Mirador de Montepinar. ¿A quién no le hace reir ésa comunidad de vecinos que a mi personalmente nunca me deja indiferente, es una de las mejores comedias dela que se puede disfrutar viendo sus peripecias, sus historias, sus chismes y sus risas, parodiando a una vecindad muy actual?

Pablo Chiapella da vida a Amador “el cuqui” en La que se avecina y sus frases: pero no toques ¿por qué tocas? ¿un pinchito? ¿quieres salami? ¡¡ Cuqui, ay la Cuqui....(llorando), Mmmmm Merengue, merengeeeeeee......son simpatiquisimas.

Aunque, si les digo a mis hijos: merengueeeeee.....me cantarán alguna canción de Juan Luis Guerra o de Elvys Crespo y se pondrán a bailar merengue: ese estilo musical caribeño que nació a principios del siglo XIX en la República Dominicana.

Y si a mi suegro le digo: merengue.....me dirá que es lo que más le gusta, un dulce con merengue (merengue, suspiro o meringue) ésa delicia preparada con clara de huevo batida y azúcar.

Para él preparé estos merengues horneados que quedaron exteriormente secos y crujientes y en su interior húmedo y jugoso, realmente deliciosos.

¿Como los hice?

En un recipiente mezclar 40 gramos de azúcar glass con diez gramos de maicena y reservar.

En un bol totalmente seco, batir dos claras de huevo a temperatura ambiente (con cuidado de que no tengan ningún resto de las yemas), añadiéndo una pizca de sal, con un batidor (yo uso uno eléctrico con dos varillas) e ir añadiendo poco a poco, lentamente, sin dejar de batir, 50 gramos de azúcar, hasta que estén a punto de nieve.

Tamizar la mezcla de azúcar glass y maicena sobre el merengue removiendo con una espátula-lengua con movimientos envolventes de abajo a arriba, evitando a ser posible que se bajen.

Bien con una cuchara o una manga pastelera ir incorporándo el merengue en los moldes.

Introducirlos en el horno previamente calentado a 100º C (baja temperatura) dejándolos hacer durante unos cuarenta y cinco minutos, procurando no abrir la puerta y dejándolos en el interior del horno hasta que se enfríen, . Esta manera tan paulatina de enfriar evita la bajada brusca de temperatura que provoca grietas en el merengue e impide que se pongan blandos.

¡¡ Disfrútenlos !! Y disfruten una vez más de uno de los cuadros pintados por mi suegro, una calle del popular barrio malagueño de Capuchinos.