Lo cierto es que aunque las plantas te encanten, de fácil nada de nada... Mi experiencia me dice que las plantas son seres sensibles, caprichosos e inestables que pueden llegar a desesperarte... Si tenéis ganas de pintar vuestro espacio de un verde natural y a pesar de poner ganas no llegáis a conseguirlo, aquí van algunos consejos dirigidos al cuidado de PLANTAS DE INTERIOR, que a mi me funcionan...
- Tener plantas es UNA AFICIÓN como otra cualquier y debemos DEDICAR TIEMPO SUFICIENTE para cuidarlas que será muy variable dependiendo del número y la tipología.
- Toma nota cuando les abras las puertas de tú casa por primera vez, en tú centro de jardinería o por internet de los cuidados básicos de la especie en cuestión, la información recopilada te será muy útil, aunque más adelante, descubrirás que tú planta es "única" como su dueña/o.
- ¡IMPRESCINDIBLE! acudir a un comercio donde haya profesionales y amantes de las plantas que te den buenos consejos y te quiten de la cabeza ideas descabelladas. Vender una planta no es sólo cobrarla.
- No hace falta estar encima de ellas, una relación fluida pero no basada en el acoso es lo que más les va, a veces, lo que mejor funciona es no obsesionarse sin dejar la observación en el olvido.
- Cuando compres una planta colócala inicialmente, sin trasplantarla, en un rincón con suficiente luz, riégala únicamente cuando veas que la tierra está seca (no sólo en superficie) y protégela de corrientes de aire. Dedícate a observarla y pasadas unas semanas te irá dejando claras sus necesidades "reales" y "específicas"
- No des por sentado que todas las plantas son iguales y no las ofendas juzgándolas de SIMPLES:LUZ+AGUA, son los PRINCIPALES ERRORES que se cometen con ellas.
- Si la planta responde bien a tus cuidados iniciales en las cuatro primeras semanas (no presenta hojas amarillas o puntas secas) por nada del mundo, la cambies de sitio, pues una vez se adapte a un rincón, cualquier cambio de ubicación puede afectarle muy negativamente... A partir de este momento...
Abona con regularidad (con un abono universal), una vez al mes en primavera y otoño.
Observa si sufre con los cambios de temperatura estacional, si la temperatura del cuarto varía mucho en invierno y verano, la planta puede acusarlo (algunas hojas se ponen amarillas...), así que una vez descubras que es lo que no acaba de gustarle, dale unas vacaciones "temporales" y colócala en un rincón un poco más fresco o más cálido intentando mantener las mismas condiciones de luz y riego. En cuanto las temperaturas se suavicen devuélvela a su ubicación original.
Trasplanta en primavera u otoño, cuando las temperaturas son suaves y sólo cuando la planta pida a gritos una nueva casa...
- Las raíces salgan por debajo
- El sustrato con el que han venido es pobre
- La planta ha dejado de crecer y desarrollarse
Cuando trasplantes elige un recipiente adecuado al tamaño de la planta, ni demasiado pequeño, ni demasiado grande.
¡NO PUEDO RESPIRAR! Uno de los mayores errores que se cometen en el trasplante es elegir recipientes muy grandes donde las raíces se ahogan o recipientes muy pequeños... Usando como excusa que no vamos a poder continuar usando ese macetero tan bonito donde ocultamos el feo tiesto... Asimilemos que las plantas crecen, y van aumentando de volumen, no debemos coartar su crecimiento e intentar conservar el tamaño que nos conviene decorativamente hablando.
- VENTILA, realizando varias perforaciones en la base del recipiente para que las raíces puedan respirar y se elimine el exceso de agua-humedad.
- Procura un BUEN DRENAJE, recubre el fondo del nuevo recipiente con arlita para que retenga humedad el tiempo necesario entre riego y riego.
- Pon una capa generosa de tierra nueva antes de introducir el cepellón en el nuevo tiesto, pero no te excedas con la nueva capa pues las raíces tardarán mucho tiempo en alcanzar la zona ventilada y acabarán ahogándose.
- Evita tapar el tronco de la planta con tierra nueva pues acabará pudriéndose, el tronco inicial debe seguir quedando expuesto y ventilado.
¡CALMAR LA SED!... Recuerda que en verano el riego debe de ser más abundante, pero no debemos encharcar el sustrato pensado en que la planta racionará el agua a su gusto y nosotros ganaremos tiempo. Lo importante es descubrir si la planta reacciona bien regándola cuando el sustrato esté seco, o por el contrario, necesita mantener una humedad moderada y constante. Una vez lo determines, dale el agua que necesite "CON REGULARIDAD". Algo que las plantas detestan, es que un día las inundes y luego las mantengas secas mucho tiempo. procura regarlas los mismos días de la semana, observando la misma medida del recipiente (por lo general para plantas de interior, una vez a la semana en verano y una vez cada 10-12 días en invierno)
¡LA LUZ ES VIDA!... Coloca SIEMPRE tus plantas en un espacio luminoso sin exposición directa a la luz, no te obceques en ese rincón que ha quedado libre donde quedaría realmente preciosa. Con el tiempo te darás cuenta si la ORIENTACIÓN elegida es la que más le gusta... Si a pesar de tener luz y riego adecuado, la planta no presenta aspecto sano, colócala cerca de una ventana con otra orientación, pues dependiendo de esta, la intensidad lumínica a lo largo del día varía considerablemente.
¡SE ME LLEVA EL VIENTO!... A NINGUNA planta le gusta estar sometida a corrientes, no las coloques cerca de puertas o ventanas abiertas.
Se nota mucho que las plantas son mi debilidad ¿no?...
Un último consejo, muchas son las plantas que han pasado por mi casa en los últimos años y con las que literalmente "HE PERDIDO MI TIEMPO y MIS NERVIOS" llegando a la conclusión de que por mucho que me empeñe... Hay plantas, con las que ni mi vivienda ni yo tendremos buena sintonía nunca (porque no dispongo de luz adecuada, condiciones de temperatura optimas, o simplemente superan mis capacidades), así que os animo a apostar por aquellas que quieran vivir en vuestra compañía, que no tienen porque ser necesariamente las de cuidado más fácil, ni las de mayor belleza... Una planta agradecida, mostrará un aspecto impecable y lucirá igual que la más exótica.Ufff, espero no haberme extendido demasiado y que mis comentarios os hayan resultado útiles... Podría pasarme años hablando de plantas y no acabaría nunca.
Otro día, si os parece, nos ponemos con LAS PLANTAS DE EXTERIOR, que son para echarlas de comer aparte... Por cierto, cualquier aportación o comentario será muy bien recibido... ¡Aprender es lo que cuenta!Os dejo, con un tutorial que me ha encantado, para conjugar decoración con el uso de plantas.
Una alternativa muy original, que ¡OJOOO!, me temo que aunque el resultado sea precioso, sólo se puede permitir con Crasas, Cáctus y escasas plantas de lento crecimiento, que requieren poco sustrato y poca agua (hay muy pocas de esas!!!!)Un beso fuerte y ¡FELIZ TARDE!Palmira
Fuente: A Beautiful Mess