Ahora, de 48 años, el expiloto de Ferrari y Mercedes es apoyado por un equipo de profesionales de la salud mientras se recupera en total secreto en su propiedad cerca del lago Ginebra en Suiza.
Pero la revista alemana Bravo informa que con la condición de Schumacher todavía "débil", la esposa de la alemana Corinna ha buscado ayuda de los EE.UU.
El informe dice que Schumacher podría ser transferido a Dallas, Texas, donde ya posee una granja de ganado.
Allí, un especialista en lesiones cerebrales llamado Mark Weeks tiene una clínica que podría ser una "nueva esperanza" para la familia Schumacher, afirma Bravo.
"Tenemos amplia experiencia con pacientes traumatizados", dijo Meeks. "Probablemente no hay clínica en Europa que maneje tantos casos como nosotros".