"Creo que el documental es una cosa muy abre-mente"En la Cinemateca Distrital tuve la oportunidad de ver la quinta película de la Muestra y el tercer documental colombiano de los cuatro que se presentaron; El Charco Azul, es un mediometraje de 52 minutos, que nos presenta a la familia Ordoñez, familia que como tantas otras han llegado a Córdoba - cerca a Buenaventura-, y se han instalado allí, cerca a unos línea férrea de tren, en donde se configuran las leyendas, mitos, viajes y demás opciones tanto para los niños y jóvenes que habitan allí; así como para otras historias en donde la muerte y violencia tienen cabida.Los rieles del tren son un conector entre la ciudad y la selva, entre la realidad y la fantasía, es en cierto modo, con el paso de los años, la línea entre los miedos, las esperanzas e ilusiones, que cada uno de estos personajes comparte y siente, en este relato documental, que funciona como observación de una comunidad, que como tantas otras en el país, vive entre el paraíso de la naturaleza y la marginalidad de una sociedad.
Documental estructurado como un viaje; seis estaciones, en las que cada personaje/s cuenta/n una historia, mostrándonos idiosincrasias, fantasías y realidades de un pueblo, que sobrevive con lo que tienen a mano, y en donde la felicidad se mide, por las distracciones que crean o asumen los niños y los jóvenes, que ven en lo que está a su alrededor y en las vías del tren - tren que no pasa hace 40 años- ya no una vía de escape, sino sino un continuo viaje a su propias realidades.La sobria y respetuosa fotografía/cámara, corre a cargo de la propia directora, quien no sólo se encarga de registrar a esta pequeña comunidad, sino de estructurar la guía narrativa (guión), y las animaciones de los créditos finales